domingo, 31 de enero de 2010

¿Hay alguien ahí?


Leo, entre sorprendida y descojonada, que se ha abierto un debate en torno a la peregrina idea de seguir enviando mensajes al espacio exterior para ver si hay respuesta de vida alienígena... Ya habían, en algunas ocasiones anteriores, enviado mensajes al espacio, como por ejemplo una canción de los Beatles por si "alguien" podía apreciar las melodías de los de Liverpool. También me acuerdo de aquella película llamada "Contact" que lidiaba el mismo tema. Y no solamente está de nuevo el tema candente, sino que se ha celebrado recientemente una conferencia internacional de expertos en Londres.
Pero, me pregunto si es prudente avisar de nuestra presencia en nuestro ya de por sí maltrecho planeta para que encima nos caigan "vecinos interestelares" hostiles. Porque además, los mensajes no son tan inocuos como la canción de MacCartney. Los hay que son mensajes de amor, fotos de políticos y gente famosilla, publicitarios y otras lindezas. A saber si alguno se va a sentir molesto o incluso amenazado. Encima, como el servicio postal interestelar funciona peor que el nuestro, estos mensajes no alcanzarán lugares del espacio supuestamente habitados hasta el 2439. Toma ya. Para aquel entonces, no solamente MacCartney, sino todos los que supuestamente puedan leer esto y la que viste y calza, estaremos criando malvas. Y es que desde el año 77 del pasado siglo, se están escudriñando los cielos para ver si se reciben señales de otros mundo. Los responsables del proyecto ya se han cansado de escuchar nada y, desesperados, se han dedicado estos últimos años a enviar los mensajitos de marras.
Y es que cuando no se sabe absolutamente nada de lo que hay por esos mundos interestelares, más le vale a uno andarse con cuidado. No vaya a ser que ocurra lo que en la película "Mars attack"...
Pero vamos a ver, señores... Desde los albores de la humanidad (la nuestra), hemos hecho guerras, sometido a torturas, masacrado a nuestros semejantes; aunque paradójicamente y de forma paralela, hemos socorrido al necesitado, enviado voluntarios a desastres naturales (leáse, ultimamente Haití). Cuando la mayoría de la población de este planeta no tiene qué llevarse a la boca mientras unos pocos se preocupan del montante de su pensión multimillonaria... algunos pasan su tiempo en futilidades propias de adolescentes con acné para dilucidar si mandando unos cuantos mensajitos inocentes al espacio, y nos vendrá de vuelta un tropel de marcianitos en son de paz para solucionarnos los problemas... "Hé, oigan, que estamos aquí... yujuuuuu, aquí, el tercer planeta a la derecha del sol! No tiene pérdida".
Lo que tiene bemoles es que desde hace décadas, se han avistado docenas de ovnis en forma de platillo volante, de bola de luz, o con formas extrañas, y que se desplazan a más de 5000 kilómetros a la hora. Eso sí, siempre en medio del campo o en mitad del bosque. Pero nunca en la plaza de la Cibeles o a los pies de la Torre Eiffel. ¡Qué casualidad, hombre!
Conclusión:
- O los ovnis recorren millones de kilómetros únicamente para admirar los árboles, las vacas que pacen o los peces, y abducir a inocentes granjeros con los cuales hacen experimentos escalofriantes, siempre de naturaleza sexual...
- O bien son seres asociales, a los que no les gusta las grandes multitudes...
- O les asusta pillar la gripe A...
- O bien han visto todas las pelis de marcianos que se han hecho hasta ahora, y están convencidos de que al final llega una panda de americones, y que a todos los que han venido del espacio exterior los fulminan en menos que canta un gallo o los mandan de vuelta a su galaxia con una buena patada de bota tejana en el culo...
- O bien... nada, porque ya empezamos algunas a estar hasta el moño de tantas tonterías como el triángulo de las Bermudas, el monstruo del Lago Ness y demás...
Señores de la política internacional, ya basta de gilipolleces... Dedíquense a arreglar los problemas de ESTE planeta y déjense de gaitas interestelares. Punto.

sábado, 30 de enero de 2010

Sarrancolin

Sarrancolin es una pequeña población que debe su fama a las canteras de mármol que sirvieron para decorar profusa y lujosamente muchos de los rincones del famoso Palacio de Versailles. Y también lo visitaremos.

miércoles, 27 de enero de 2010

Mauvezin


El próximo día 28 de febrero, salimos (un grupo de 22 alumnos de 3º y 4º de ESO, y mi compañera Concha) de viaje de intercambio para Tarbes.
Nuestro programa de actividades incluyen muchas visitas interesantes; entre otras, el castillo de Mauvezin, del que he puesto foto a la izquierda de estas líneas. Pero también iremos a Pau, a visitar su insigne castillo, visitaremos Tarbes, Arreau, Sarrancolin, el Pic del Midi y muchas otras más cosas. Ya iré poniendo post con fotos de esos sitios.
Continuará...