domingo, 28 de diciembre de 2008

Domingo de monasterios y cuevas

El Monasterio de Poblet es, de los tres principales de los que consta la Ruta del Císter, el más grande, el más impresionante, arquitectónicamente hablando y el mejor conservado. No es por nada que la Unesco lo designó hace unos años como uno de sus edificios patrimoniales protegidos. En la actualidad, alberga una treintena de monjes benedictinos (orden fundada en el siglo V por San Benito, el artífice de "ora et labora"). En sus amplias dependencias, podemos admirar por ejemplo, una sala capitular que aún hoy es utilizada (el monasterio se empezó a construir en el siglo XI y tardó en completarse la friolera de cinco siglos, por lo que como ejemplo de la diferencia de estilos arquitectónicos podemos ver cómo cado uno de los laterales de su claustro presenta detalles románicos y góticos alternativamente), una basílica que alberga las tumbas de los principales reyes de Aragón, y en rey superstar, los restos de Jaime I el Conquistador, una biblioteca que atesora unos 80.000 volúmenes, unas cocinas pantagruélicas, unos dormitorios que hasta hace poco años todavía ocupaban los monjes ( en la actualidad, ocupan unas celdas con calefacción, signo de los tiempos modernos, comodidad obliga...) Aunque las explicaciones de la visita guiada eran en catalán (si las quería en castellano, tenía que esperar una media hora más) eran facilmente comprensibles; además, me hace hacer un excelente ejercicio mental de traducción y comprensión. Es curioso cómo al hablar francés, se me hace increíblemente fácil entender esta lengua.
Al regreso de Poblet, he parado en L'Espluga de Francolí, a visitar su famosa cueva, de la época neolítica, de cuando los Neandertales poblaban la zona, y antes de que les tomaran el relevo los Homo Sapiens. Las dos cuevas, porque son dos, son impresionantes. No hay pinturas pero ni falta que hace. Además en el silencio que propiciaba lo reducido del grupo en el que me he integrado, hacía que la inmensidad de las entrañas de la tierra resultara más impresionantes si cabe. Son las séptimas en longitud del mundo (las cuartas de Europa). Con animaciones de vídeo, recreaciones de escenas de la vida de la época, da escalofríos pensar en lo dura de aquella vida, en el día a día, en las dificultades de supervivencia, en los peligros que a cada rincón acechaban, en las fieras que comprometían perpetuar la especie, en la dureza de la vida itinerante de aquellos pequeños núcleos de personas luchando por salir adelante sin comodidades, sin facilidades, sólos con su valor y su fuerza personal...
Como finalmente he tenido que volver a siglo XXI al finalizar la visita, y dada la hora que ya se había hecho, he decidido que iba a comer en algún restaurante de Montblanc. Finalmente, y siguiendo los buenos consejos de mi consejera personal de los apartamentos, he ido a comer a Cal Colom, un restaurante de esos en los que no se ven apenas turistas, escondido en un callejón ínfimo, no muy lejos del apartamento. Con resultado no sólo de aprobado, sino de un notable alto por lo sabroso de sus platos y lo exquisito del entorno y del servicio. Además, he tenido suerte, ya que de haber esperado un día más no habría podido degustar su cocina, al cerrar precisamente mañana para tomarse un descanso por vacaciones.
Mañana, creo que visitaré Tarragona.

sábado, 27 de diciembre de 2008

Desde la Conca del Barberà

Escribo desde un ciber que milagrosamente he encontrado. Sí, ya sé que alguno me dirá qué qué hago desde un ciber si me llevé el portátil porque me aseguraron que en el apartamento había wi-fi. Pues al parecer, el wi-fi y el portátil no son muy compatibles porque no hay manera de que se pongan de acuerdo para trabajar juntos. Así que... mi gozo en un pozo...
Como iba diciendo, me encuentro en la Conca del Barberá, más concretamente en la capital de su comarca: Montblanc. Nada que ver con los Alpes ni con la sede de las estilográficas de alto standing pijero. Este Montblanc es un pueblo medieval con sus murallas de gruesas piedras, sus callejuelas empredadas, sus edificios rotundos y longevos, sus pequeñas tiendas tradicionales, sus gentes amables y una paz que precisamente andaba buscando y que creo que me va a venir como anillo al dedo en estos momentos.
Llegué el jueves por la tarde, día de Navidad, tras un trayecto que hasta se me hizo corto: algo más de cuatro horas y media de trayecto por autopista. Y eso que paré un par de veces para los menesteres de rigor. El día estaba bastante soleado y no había demasiado tráfico en ninguno de los dos sentidos. Precisamente por eso fue que elegí ese día para viajar. Teniendo en cuenta que las previsiones anunciaban mal tiempo para los días siguientes y sin ninguna premura de tiempo ni (casi) limitación de estancia, me disponía a disfrutar de estos parajes, en principio, desconocidos para mí.
Es mi primer viaje a Tarragona. Nunca antes había sentido curiosidad por visitar estas tierras y por diferentes motivos, estas navidades le ha tocado. Para aquellos que me conocen, y saben de mis ansias viajeras, no se habrán de extrañar en esta elección. Me gustan las tierras norteñas, eso no es ningún secreto. Creo que hay un "algo" que me empuja a ir hacia el norte, porque mi intuición me dice que esas latitudes son beneficiosas para mi equilibrio y bienestar. Y algo de cierto hay cuando en mis últimos tres o cuatro viajes (Asturias, Navarra, La Rioja, Huesca) lo he elegido para descubrir regiones, territorios y ciudades interesantes. También es cierto, que durante mis años de vivir en el sur, quedé un poco saturada de un cierto tipo de entornos. Ahora creo que necesito más ver montañas, paisajes verdes, valles y picos, carreteras serpenteantes, construcciones diferentes, piedras distintas. En definitiva, cambio completo de decorado.
Tiene su cierta lógica si tenemos en cuenta también que paralelamente, también están ocurriendo cambios sustanciales en mi vida. Ya se sabe lo que dice la sabiduría popular: "los cambios nunca vienen solos". Pues nada, que todo cambio siempre sea para mejor...
He recorrido un par de veces el pueblo. Me ha gustado tanto lo que he visto que he hecho ya un montón de fotos. Como me traje el pen-drive, espero poder copiar alguna foto para colgarla aquí
pronto. De momento el finde se anuncia tranquilo. No tengo planes de momento, así que mientras esté el tiempo lluvioso, no me moveré mucho. Total, tampoco hay prisa ni los monasterios cercanos de la Ruta del Císter se van a mover de sus emplazamientos.
Paz y salud a todos!
...continuará... (bueno, eso espero)

lunes, 22 de diciembre de 2008

Gran robo de pelucos



Jeje... No hace ni dos semanas que los de Harry Winston, en una de las zonas más glamourosas de París se llevaron el chasco del año al ser víctimas de uno de los mayores robos del mundo en su joyería (85 millones de euros!). Y no podía acabar el año sin que, de nuevo, salte a la palestra otro de semejantes características. Y es que en una de las relojerías de más lujo y pijerío de la capital franchute, se acaba de perpetrar uno de los robos de pelucos de más valor del mundo mundial. Nada menos que medio millón de euros en relojes. Pero nada que ver con los casio de plástico de toda la vida, no, qué va... Relojes de lujo de los de cada uno a más de un año de sueldo de mi vida. Al parecer dos tipos armados se personaron en una joyería que hay en la Rue de Rivoli, en la avenida que bordea el Louvre, y tras amenazar al personal de la misma, le obligaron a abrir la caja fuerte, amén de lo que había en las vitrinas, que en estas fechas pre-navideñas estaba a rebosar de modelitos caros. Según los testigos, iban vestidos con gabardinas largas tipo Neo de Matrix. Este último detalle me ha dejado grogui. Eso sí, ladrones, pero tope "fashion" . Por cierto, que me resulta cuanto menos llamativo el hecho de que las cifras que ultimamente se están barajando para cualquier cosa se haga por millones (de lo que sea, que poco importa): pérdidas de tal o cual sector económico, ayudas a los bancos por parte del gobierno de turno, robos o timos varios, pérdidas de empleo... Es como si esto hubiera sucedido siempre, como si nos hubiéramos acostumbrado de una forma natural a estas cantidades astronómicas, y sin embargo a mí personalmente, me siguen pareciendo escandalosos... Y claro, con tantas cifras astronómicas, lo de setenta y tantas mujeres muertas a manos de sus parejas o ex nos resulta banal, casi, casi sin importancia. Qué gran paradoja... Ya lo decía Einstein cuando afirmaba que había dos cosas infinitas en la vida: el universo y la estupidez humana, y de lo primero no estaba muy seguro.


Digo yo que con lo de los móviles, ¿quién lleva todavía reloj a estas alturas? Bueno, yo, que en el insti no llevo el móvil por razones obvias y sí el reloj para saber cuánto me queda para aguantar a los petardos de segundo de la ESO... Si hasta los alumnos llevan uno en la mochila (o en el bolsillo) y cuando les pillas con la mano en la tecla, se disculpan diciendo "es que estaba mirando la hora". Definitivamente, ya nadie lleva peluco. Ni siquiera los maquinistas de Renfe (esto va por ti, Jota!). Y es que volviendo al tema de los móviles, ahora llevan (casi) de todo: GPS, calculadora, videojuegos, tele, MP3. Anda que MacGiver se preocuparía por inventar más trucos para hacer una bomba de un chicle y un elástico... Debo tener de los poquitos modelos de móviles que no sirve más que para llamar, para que me llamen, para enviar mensajes y para recibirlos... y pare usté de contar. Y es que ahora que me quiero cambiar de móvil, tengo un pedazo de dilema que no me deja dormir: sigo con un modelo que ni siquiera lleva cámara de fotos? o bien me compro uno de esos que llevan hasta alarma antiincendios?

Desdramatizando la anécdota, y en cualquier caso, los ladrones ya no tendrán excusa para llegar tarde a la cena de Nochebuena con sus mamás y/o novias respectivas... y los fabricantes, pues eso, que no les tengo mucha lástima. Ah! y yo seguiré de momento pensando qué tipo de móvil me voy a comprar. Y por supuesto, seguiré mirando la hora en mi reloj. Qué se le va a hacer!

domingo, 21 de diciembre de 2008

2009, el gran agujero negro



2008 está a punto de terminar y nos ha dejado múltiples acontecimientos que han marcado la actualidad y han dejado casi sin aliento este ya de por sí convulso planeta. Es hora de hacer balances, personales, económicos, sociales y emocionales. No es que sea yo muy partidaria de hacerlos, muy al contrario, soy de los que consideran que el tiempo es una división arbitraria y un continuum sin principio y sin fin. Así que le daré la vuelta al argumento de ver qué ha sido el año 2008 para ver qué se adivina y qué nos deparará el que está a punto de entrar, el oscuro y temido 2009.

Lo que un sociólogo francés ha comentado sobre lo que nos espera a la vuelta de la esquina es que 2009 será literalmente "un gran agujero negro". Dicho así, se nos pueden quitar ipso facto las ganas de llevar a cabo cualquier tipo de celebración, y hasta es posible que se nos atraganten las uvas de la nochevieja. Si la expresión "annus horribilis" se nos quedó tatuada en la memoria de boca de la Reina de Inglaterra cuando, tras el sonado divorcio de su hijo Carlos de Diana, se le quemó parte del palacio de Windsor, bien podríamos tomarlo prestado para aplicarlo a este año próximo. Y es que el asunto Madoff, ha representado un jarro de agua fría más en la cabeza de los contribuyentes. Pues si bien ha timado descaradamente a las grandes fortunas, el ciudadano de a pie, que ya está perdiendo la paciencia y sobre todo la confianza en los bancos, se dicen que ya no les queda más que perder el empleo, y con la que está cayendo, y las previsiones agoreras que apuntan para el próximo ejercicio no hacen más que confirmar lo de "agujero" y lo de "negro". Y ningún sector social se va a ver salvado. Cuanto más abajo en la escala, menos dificultades, ya que hace tiempo que los que no tenemos mucho nos hemos acostumbrado a vivir con poco. El discurso que nos sirven los medios de comunicación día sí, día también, ya se ha generalizado. Para muchos, lo del balance negativo lleva décadas de aplicación. Y el ambiente pesismista no ayuda precisamente mucho. Por eso, más de uno se refugiará estas fiestas en la familia, aunque el resto del año se tiren los trastos a la cabeza.

Mi teoría es que una nueva era se ha puesto en marcha. Lo de Atenas no es más que la gota que ha hecho desbordar el vaso. Las protestas se han ido extendiendo a velocidad de mecha de dinamitay la gente ya no se queda impasible, esperando que alguien le solucione los problemas. Sale a la calle a expresar aquello que se ha callado durante años. Creo que alguien se hartó de que los gobernantes mantengan (no se sabe cómo) una retórica puramente ideológica. Es tiempo de cambios, de modificaciones, de rectificaciones, de elecciones personales diferentes. Porque si nos paramos a pensar, hablar de dos mil nueve como agujero negro es al fin y al cabo un afeumismo. Deberíamos mejor hablar de socavón. Tampoco hace falta ser muy listo para saber que hay revuelta (y por qué no, revolución!) en el aire. Cuando la inmensa mayoría de la gente se ha visto afectada, de una manera u otra, más le valdrían a los gobernantes que vigilaran sus acciones, decisiones, promesas y consecuencias. Entramos en tiempos de reformas, que en su sentido estricto significa "cambiar para mejorar", no lo olvidemos. Y es que los tiempos que se avecinan nos la demandan a gritos. Reformas, ya! Cambios, enseguida! Y vaya si los habrá. No hace falta tener la bola de cristal a mano para preverlas. Despidos a porrillo, EREs a puntapala, listas del paro interminables. Pero no son cambios al estilo Lampedusa; no nos engañemos. Los cambios tienen que ser reales, auténticos. Los cambios sociales están a la vuelta de la esquina, señores políticos, legisladores, potentados... y vosotros, bailando sobre el volcán... Pero no nos engañemos: es necesario que la palabra reforma sea sinónimo de progreso,no de regresión generalizada. Porque de ninguna manera se podría seguir avanzando con coherencia ni resultados tangibles para construir un estado de bienestar. En estos momentos, lo que impera por parte de los políticos es cinismo, ausencia de diálogo y mentira. Lo cual ha dejado de impresionar de cara a la credibilidad. Esta crisis va a ser la más importante desde la segunda guerra mundial, lo queramos o no. Y el mundo va a cambiar, lo queramos o no. Va a suponer una ruptura con nuestra forma de ver el mundo, la realidad y nuestro día a día. Y es también una ruptura histórica con nuestro modo de ver la vida y la civiliacion. Cuando miramos a nuestro alrededor, sin pensar siquiera en los sondeos de opinión pública, asistimos atónitos al desmoronamiento de la banca, del sistema capitalista en el que estaba basado (nos preguntamos: "Esto qué es?") y nos estamos preguntando qué será lo próximo... La incertidumbre total se apodera de nosotros. Nadie se atreve a dar un paso en falso, nadie quiere mover ficha por temor a terminar de fastidiarlo... En nuestro vecino del norte, se van sucediendo los movimientos estudiantiles en secundaria desde hace ya un par de meses, y es sólo la punta del iceberg. La crisis medioambiental ya se va manifestando poco a poco y cada vez con más contundencia en diferentes puntos del planeta, a cada vez que se reunen los más poderosos.

Déficit presupuestarios, guerras en las bolsas mundiales, calentamiento climático, crisis de la energía, sobrepoblación mundial, OGM, Palestina, Iraq, Afganistán, paro, deuda externa, quiebras, ladrones de guante blanco financieros, mafia, polémica de las cruces en los centros escolares, privatización de los servicios públicos, inflación, deflación, competencia salvaje, fondos de pensiones, contaminación, sequía, pandemias, pesca intensiva, miseria, hambruna, piratería...

Hagan juegos señores, todavía quedan papeletas para el sorteo!

sábado, 20 de diciembre de 2008

La pirámide que se vino abajo

El tema ya estaba durando demasiado. El tipo este, el Madoff, que tiene nombre de vodka ruso baratejo, tenía que haberse caído con todo el equipo hace ya mucho. Después del mayor descalabro financiero del mundo mundial, el planeta empeza a hacer balances de las pérdidas. El jueves pasado, fue detenido, con todas las de la ley. Hasta el día de antes, era un famosísimo gestor de fondos y antiguo presidente del consejo de administración del Nasdaq, una de las dos bolsas de Nueva York, lo cual equivaldría a ser semi-dios en el ámbito del dinero. Ha sido acusado de haber ideado, montado y gestionado un inmenso fraude piramidal.

Muchos de los clientes, que ahora son sus víctimas, de este hombre, calificado como uno de los más ricos y poderosos del mundo, han sido estafados, algunos incluso durante años. De Tokio a Londres, pasando por los EEUU, estos clientes, entre otros entidades bancarias de entre las más poderosas y solventes, fondos de inversión y muchas fortunas personales, están haciendo las cuentas de todo lo que han perdido sobre los fondos que confiadamente entregaron a Madoff. En Francia, precisamente una de las entidades más perjudicadas han sido BNP, cuyo presidente ha sido nombrado paradójicamente hace un par de semanas, "mejor banquero de Europa"... Qué ironías nos depara el destino ¿no te parece, estimado lector? Porque si este es el mejor, ¿cuál debe ser el peor? Por aquí, por Ejpañistán, han sido damnificados varios bancos, entre ellos el omnipotente Santander (la nada despreciable cifra de 3 millones de dólares). Se me atrantaga la voz cuando intento imaginarme el montonazo de pasta que ha timado a muchos incautos. Sin ir más lejos, los intocables suizos también se podrían contar entre los estafados. Por cierto, que ha sido puesto en libertad, previo pago de una fianza de 10 millones de (glups!) dólares. Esto último me ha dejado a cuadros escoceses. ¿Los habrá pagado de esos milloncejos de nada que tenía en su oficina londinense? Por cierto, que el pastel se ha descubierto (no podría ser de otro modo) cuando sus clientes han querido retirar el capital que habían entregado a Madoff y se han percatado de que la caja fuerte de este buen señor estaba vacía... Por cierto, que me pregunto qué ha hecho mal con respecto a los otros, porque con la experiencia de este tipo, la consideración de que gozaba en el seno de la sociedad financiera norteamericana y su fama de honesto (sic) no le han podido mantener a resguardo del escándalo. Si es que tarde o temprano, se le acaba por ver el culo a más de uno. Ya decía yo que hay una justicia divina que obra precisamente cuando tiene que hacerlo. Ya basta de tener que pagar siempre los justos por los pecadores. Llegan nuevos tiempos para la lírica, que decían Golpes Bajos. Los tiempos están cambiado muy rápidamente y los que se han estado riendo a mandíbula batiente de los pobres curritos de a pie ahora tienen que tragar bilis a tazas llenas. Pues mira, pues m'alegro!

Volviendo a un detalle sin (casi) importancia, me parece (y esto es algo muy subjetivo) que 10 millones de fianza para un desfalco de 50 mil millones de dólares es una minucia. Tendrían que haberle enchironado sin posibilidad de fianza alguna. Seamos por un instante algo sensatos: alguien todavía está convencido de que el capitalismo como tal puede sostenerse mucho más todavía conforme está estructurado? ¿Hasta cuándo se van a seguir privatizando los beneficios y socializar las pérdidas? Se hace necesario encontrar un nuevo modelo menos perverso, más centrado y mentalizarse por fin que el mercado no es capaz de autoregularse. Lo que se merecerían muchos bancos son precisamente que los clientes fueran uno tras otro retirando sus fondos, y que entre otras iniciativas que el sueldo de uno ya no tuviera que ingresarse obligatoriamente en una cuenta bancaria. Eso sí sería una gran revolución, sin duda alguna, y además no se le estaría dando de comer a los individuos más perjudiciales: los banqueros. Porque anda que no tardan en llamarte la atención cuando te quedas con el saldo en rojo siquiera veinte euros...

Si este buen señor se hubiera jubilado hace ya diez años, con 60, no habríamos llegado a este descalabro financiero. Sus cuentas habrían sido auditoriadas y el engaño descubierto, pero en 1998! Es realmente vergonzoso permitir a presidentes de bancos, que al fin y al cabo no son más que especuladores, financieros, senadores, etc. trabajar hasta los setenta y encima percibiendo rentas escandalosas hasta el final de sus días laborales. Pobres asalariados que no solamente llegan a la jubilación con una pensión mediocre, sino que físicamente están agotados... Habría que volver a un sistema económico casi olvidado: el del valor del trabajo. El capital es el que sostiene el valor del trabajo. El trabajo es lo que le da valor al capital Pero cuando los banqueros se toman por amos del mundo y quieren valorizar su participación, pues esto es lo que recogemos: un descalabro a nivel mundial. En cualquier caso, yo nunca seré rica, eso está claro, pero si sigo como hasta ahora, creo que nunca perderé mi sentido común y mi conciencia del prójimo. Esta gentuza se corrompe totalmente con tantas cifras astronómicas de pasta gansa. ¿Y por qué lo hacen? ¿Para satisfacer qué? Pues no tengo ni idea, pero imagino que es para calmar un cierto deseo de poder, una cierta satisfacción de ego desaforado. Vete tú a saber... Lo que no han calculado es que sus actos tienen una repercusión social (además de mediática) en la vida del proletariado, incluso tienen efectos mortales. Me dan asco como seres humanos.

El año 2008 está a punto de despedirse y vamos a guardar en nuestra retinas imágenes de tornados, tsunamis, lluvias torrenciales y torrentes de miles de millones de dólares, de euros... Un año excepcional que permitirá a la tierra de hombres construir el mayor desierto del mundo. Y todo gracias al planeta financiero. Gracias por su generosa contribución. En 2009, el Nobel de la Vergüenza deberían dárselo a estos generosos banqueros y financieros por sus esfuerzos, mundialmente reconocidos, de odio a la especie humana.

Me gustaría saber cuánto tiempo transcurrirá hasta que pillen a los jóvenes tiburones que salieron de la academia privada del Madoff... Cuestión de tiempo que entren también a formar parte de la población carcelaria... Y es que hay muchos ricos que son, además de ricos, gilipollas. Porque el sistema de engaño piramidal tiene más años que la "maricastaña". Con esa pasta, ya podrían haber inventado un sistema nuevo, y sobre todo eficaz... Y a los gobiernos, señores, dejen de regalar pasta gansa a los bancos; de todas maneras no solamente nunca la devolverán, sino que la meterán en un pozo sin fondo. Ayuden mejor a los pobres asalariados, que nunca estuvieron más desprotegidos y amenazados con perder el empleo.

jueves, 18 de diciembre de 2008

Lanzamiento olímpico de zapato(s)



Ya llevaba varios días con la idea en mente, pero mis "marditas" y maratonianas sesiones de evaluación lo han retrasado un poco. Las imágenes del otro día en televisión me provocaron una sonora carcajada. Y es que el asunto todavía colea... tanto, que hasta los más avispados ya han sacado un juego ridiculizando (una vez) más a Bush. ¡Qué fuerrrrrrte!

Resulta que Bush, el inconfundible, fue el domingo, sorpresivamente, como suele ser su costumbre, de visita en territorio comanche, perdón, quería decir, territorio enemigo. Pues como iba diciendo, que de visita a Iraq, en plena rueda de prensa, un periodista le ha lanzado ambos zapatos al todavía presidente estadounidense, al tiempo que le llamaba "perro". El presi ha estado listo (pues sí, debe ser de los pocos reflejos que tiene activados -jeje, todavía me acuerdo de una galletita asesina que se le paró en el gaznate-) y se ha apartado a tiempo.

El periodista lanzador de zapatos ha sido aclamado como un héroe en su país. Y a estas alturas, el comité olímpico está pensándose seriamente incluir una nueva disciplina deportiva entre los deportes de élite: el lanzamiento de zapato. Pensándolo bien, los iraquíes partirían con clara ventaja. Aunque por otro lado, algunos conciudadanos de dicho periodista estiman que no se trata a nadie de esa forma, por muy enemigo que sea.

Admiro profundamente a este valiente chaval, bueno, al periodista. Lástima que Buch no se haya pillado al menos uno de los zapatos en plena troncha. Hubiera sido un final de reinado de lujo. Ultimamente, los líderes mundiales no ganan para sustos. Recordemos que hace apenas unas semanas, al presidente de los gabachos le salió una muñeca vudú con su efigie (a su señora esposa se le acaba de indemnizar con 40.000€ por parte de una empresa fabricante de bolsos, por haber utilizado una fotografía de la primera dama francesa como dios la trajo al mundo, de su época de top model, para uno de sus modelos, que por cierto se ha vendido como churros). Y ahora que lo pienso, no sería tan mala idea que de vez en cuando se le llamara la atención a algún mandamás mandanga de esta manera tan exótica, jeje... Ahora bien, ¿cómo se las va a apañar el periodista para que Papá Noël le deje sus regalos en los zapatos, al lado de la chimenea si se los ha tirado a Bush? ¿Nadie tiene una medalla para condecorar a este intrépido por lanzarle los zapatos a este impresentable? Francamente, confieso que admiro la valentía de este hombre que no ha tenido un ápice de miedo, ni siquiera enfrente del (supuesto) hombre más poderoso del planeta. Y deberían conservar la prueba del delito en un museo para servir de testido a las generaciones futuras. Un gesto aparentemente anodino que está cargado de simbolismo. Ah! y según los servicios de inteligencia americones, los zapatos, si bien no tenían nada que ver con las armas de destrucción masiva, eran bastante peligrosos, más que nada por el olor que desprendían... ¿Alguien podría darme información sobre si en la cultura árabe este hecho desprende un simbolismo especial? De acuerdo, no son formas de dirigirse a nadie, pero reirme, me he reído una jartá... Cuando a veces uno no puede (está muy mal visto) dar una patada en el culo de alguien, y mucho más políticamente correcto que disparar balas, yo le tiraría una de mis zapatillas a alguien. Ala, con viento fresco, Bush. Americans, go home. Por cierto, ¿de qué número era los zapatos? Curiosidad, nada más...

Volviendo al tema principal del post, osease al zapatazo a Bush, y un poquito más en serio... Me temo que de haber vivido Sadam, el periodista de marras estaría ya colgado en la plaza mayor de Bagdad, al igual que ya fueron ajusticiados más de medio millón de kurdos. Y Bush por su parte, no ha hecho sino emperorar con diferencia la situación de este ya de por sí castigado país. Ahora que se va a jubilar de la Casa Blanca, debería calzarse el traje de militar, y con el fusil al hombro, irse a "apatrullar" las calles de la capital iraquí con los soldados. Me temo que no duraría ni cinco minutos vivo... Recodemos que el individuo este reconoció su error (ver un post de no hace mucho) y ya está considerado por medio mundo como criminal de guerra (culpable de haber provocado una guerra injustificada, propiciado la tortura -léase Abu Graib- y unos cuantos etcéteras). Si alguien tuviera la valentía de juzgarle, iba derechito a una celda de prisión de alta seguridad... bueno, o a Guantánamo, para que probara de su propia medicina. Así que lo de tirarle unos zapatos no me parece tan grave. De acuerdo que no son las formas, pero es totalmente disculpable. Bush va a terminar su mandato parodiando una peli de los Hermanos Marx, en héroe indiscutible del Holywood más esperpético, al estilo Reagan. ¿Quién será el próximo en el punto de mira del descontento mundial? Se me ocurre que si el periodista hubiera alcanzado su objetivo, habría entrado en los libros de historia por méritos propios. Ya me veo los epígrafes: Kennedy, asesinado de una bala; Bush Jr, muerto (de vergüenza) al ser alcanzado por un zapatazo en plena troncha.

Por cierto, se me ocurre que a partir de ahora, los asistentes a las ruedas de prensa tendrán que descalzarse, como a la entrada de una mezquita.

domingo, 14 de diciembre de 2008

Happy birthday



No, no es autobombo (aunque por la proximidad de la fecha, podría serlo) lo del título del post de hoy. Es el cumpleaños del ratón de ordenador que estos días ha cumplido 40 años al servicio del internauta.

Da igual quién lo haya inventado, de todas maneras lo olvidaríamos al cuarto de hora. Lo importante es que este objeto que ya tiene la friolera de cuarenta años se ha convertido, con los años, en algo imprescindible con el que pasamos más horas al día que con cualquier otro. Incluso me atrevería a afirmar, sin temor a equivocarme, que muchos hombres lo tocan más que a sus parejas.

Y sino, esa extraña enfermedad de la que se contagian muchos adolescentes, propiciada por los ratones. Cada fin de semana, confina en sus habitaciones a un número creciente de jóvenes, sin embargo llenos de vida durante la semana. Sólo emergen un par de veces o tres antes del lunes por la mañana, lo justo para entreabrir la puerta y aceptar una bandeja de comida. Y es que esta enfermedad tiene un impacto irreversible sobre su cada vez más reducido vocabulario. Sin embargo les prepara para una inmersión bastante rápida en el mundo del trabajo: ideas cortas, conclusiones rápidas y simplistas y sobre todo una gran convicción de que dominan el mundo con un simple click, a pesar de que saben que sólo pueden hacerlo si el sistema lo permite.

Sí, definitivamente, sería necesario determinar un día del ratón.... sin duda.

martes, 9 de diciembre de 2008

Odio la Navidad



La Navidad, así como Año Nuevo o las vacaciones de agosto tiene sus fans incondicionales y sus incondicionales detractores. Regalos, Nochevieja, familia... Señores y señoras, hagan juegos a ver a qué lado de la balanza pertenecen...

Para empezar, hablemos de los preparativos... Es verdad, no voy a negarlo. Es un ambiente casi mágico, maravilloso el del mes de diciembre. La verdad es que no sé lo que me gusta más, si las lucecitas que inundan las céntricas calles de la ciudad que parecen que han puesto puticlubs en todas las tiendas y se van pareciendo cada vez más al barrio rojo de Amsterdam, las expediciones peligrosísimas a los centros comerciales donde un ejército de consumidores patológicos está dispuesto a matar a su propia madre con tal de no quedarse sin la última Wii de la estantería, o esa encantadora costumbre occidental que consiste en cepillarse tres veces el PIB de cualquier país africano en los fastos de una sola noche de celebración... Yo creo cada vez con más convencimiento que el implante que llevo en la nuca está más que nunca activado, que es el que me regula de manera firme las apetencias consumidoras compulsivas. Gracias a Dios. O al gran poder supremo de Reticulín. Y es que algunos confunden las Navidades con las fallas de San José, y pegan fuego a sus tarjetas de crédito (ya vendrá, ya, la cuesta de enero) como hacen los valencianos cada 19 de marzo. Y es que ya me veo las montañas ingentes de embalajes, el día después de Reyes, junto a los contenedores, al lado de las cuales la pobre Torre Eiffel se queda más que ridícula... Pero el Oscar del periodo de Navidad se lo lleva sin duda esa curiosa enfermedad, muy contagiosa por cierto, que ataca a la gente que empieza a utilizar estas fiestas para mostrarse artificialmente feliz. A esta gente se la ve por doquier en las calles, acarreando sus bolsas de compras con una sonrisa beatífica en sus rostros, de tan beatífica, que parecen gilipollas embolsados, con perdón. ¿Que te han echado del trabajo? - No pasa nada, hombre, sonríe! ¿Que tu marido se ha largado con una que tiene la mitad de tu edad? - Nada, mujer, sé feliz y vete de compras! ¿Que tu banco se ha quedado con el piso porque no has podido seguir pagando el hipotimo? -Despifarra a gusto, así, sin complejos que diría la publicidad esa de la cerveza... De todas maneras, hay multitud de gente que vive en el país de los Teletubbies en permanencia....

El segundo punto que me repatea es el de los regalos. A menudo me preguntan por qué no me gusta la Navidad, que "al menos por los regalos". Pues veréis... ejem... De entrada, porque desde hace lustros que los regalos me los hago yo. Si al menos los recibiera de forma espontánea de otras gentes... Pero no, mis alusiones dispersas, son precisamente eso, alusiones dispersas. Nadie escucha mis comentarios sobre cosas que me gustan. Y sí, me gusta regalar, y no precisamente en estas fechas. Suelo ser generosa cuando ofrezco un presente a alguien, de esos que sin costar un ojo de la cara, son originales y personalizados. Claro que siendo la única nulípara de una familia numerosa, si me pusiera a comprar regalos a mis hermanas, cuñados, padres y sobrinos, me tendría que endeudar con el banco, y eso, lo juré cual Escarlata O'Hara, pongo a Dios por testigo que no lo haré jamás. Y mira que quiero a mis siete sobrinos, que me parecen encantadores y toda la parafernalia, pero sólo el resto del año. En Navidad, niet.

En cuanto a los festejos culinarios-cebadores de Nochebuena, Nochevieja y demás, lo odio con toda mi alma. Lo siento para aquellos que esperan todo el santo año para ponerse hasta arriba de marisco, cordero a la brasa, mazapanes de Estepa y turrón de Alicante, pero... vade retro satanás... Cuando digo esto a la gente, me tachan de criatura inhumana, asocial y desprovista de cualquier sentimiento familiar. Y lo gracioso es que tienen razón. Y mira que me pasa como con mis sobrinos. Que quiero a mi familia, pero el resto del año. El día 24 de diciembre (que para más inri es mi cumpleaños, eh oui!) se deleitan interpretando unos papeles perfectos imitando al gobierno y a la oposición: llenos de buena voluntad, desbordantes de ideas, pero... cómo decir, un poco demasiado divididos para ser productivos. Todo ello aderezado con un ambiente tan distendido como el que se respira en una cumbre del G8. Mi madre ya ha perdido toda esperanza de que asista a la cena de Nochebuena. Además, los sobrinos adolescentes se sienten decepcionados porque tan pronto han tomado el aperitivo y quieren irse con la peña de amigos con los que han quedado, que por qué tienen que esperarse a que la cena termine, si quieren ya sus regalos, que por qué les hacemos regalos chorras, que preferían el dinero en vez de ese estuche con colonias baratas del súper... Y yo voy y les doy en la mano un billetito de veinte, poniendo en evidencia a los padres que se quedan a cuadros escoceses. Y claro, luego pasa lo que pasa, que todo el mundo me pone a caer de un burro a pesar de mi buena voluntad de digna sucesora de Pérez de Cuéllar, Kofi Anan y Ban Ki Moon. Y es que yo no vivo en Teletubbylandia. Bienvenidos al mundo real, que dirían los protagonistas de Matrix...

lunes, 8 de diciembre de 2008

Ponga un poco de dioxina en su vida

Las autoridades sanitarias han lanzado la voz de alarma al detectar dioxinas en la carne de cerdo irlandesa. Todos los productos a base de esta carne han sido retirados de las estanterías de los establecimientos de ese país, y también de aquellos países europeos a los que suelen exportarse, es decir Reino Unido, Francia, Japón, Alemania, Holanda, Bélgica...

Pues yo que creía que en Europa no existían estas cosas... aunque ahora que lo pienso ya hubo una alarma sanitaria hace no demasiado tiempo con pollos con sorpresa de dioxina en Bélgica. Y hace no mucho también, precisamente en este mismo blog, sacaba a colación el escándalo de la leche china, inmediatamente posterior a la clausura de los Juegos Olímpicos... Ultimamente, alimentariamente hablando, no ganamos para sustos.

Lo que realmente mosquea es que al parecer se detectó a primeros de septiembre la presencia de dioxinas en los cerdos en el transcurso de una revisión de rutina en diversos mataderos y no se ha sabido hasta hace un par de días. Las sustancias detectadas son contaminantes orgánicos persistentes y probablemente cancerígenos. En principio, se estima que dicha contaminación provendría de los alimentos dados a los cerdos. Se me ocurre aquel chiste que decía el ganadero que le daba un euro a los cerdos y se compraban lo que les apetecía; pero no banalicemos el asunto que tiene su cierta miga de escándalo (otro más en la cuenta -pollos con dioximas, vacas locas, gripe aviar, aceites para consumo humano mezclados con otros procedentes de la industria y un largo etcétera.). Sólo de pensarlo, me da nosequé. En realidad, me daría igual el tema, porque entre otras cosas, no consumo carne alguna de cerdo si no fuera porque muchos ganaderos irlandeses se irán a la ruina porque unos fabricantes de piensos desalmados les han echado porquerías en la comida para cerdos. Y precisamente ahora que llega la navidad y que los irlandeses son grandes consumidores de este tipo de carne para sus comidas tradicionales.

Por cierto que para aquellos que no lo sepan las dioxinas son esencialmente subproductos de procesos industriales: incineradores de basura, metalurgia, etc... Se acumulan en los tejidos grasos de los animales a lo largo de la cadena alimentaria hasta el hombre. Se las encuentra especialmente en aquellos productos ricos en grasas: pescados, lácteos, etc. Osease, unas verdaderas porquerías. Aviados vamos.

En alguien que como yo ha sido más de veinte años vegetariana (tuve que cambiar de tipo de dieta por problemas de metabolismo), la preocupación sobre lo que se mete uno en la boca es primordial, visto el panorama de los escándalos alimentarios día sí, día también. En algún otro post anterior ya he comentado mis opiniones al respecto, así que no voy a repetir lo dicho. Pero en este caso, no puedo dejar de mencionar algunas reflexiones. Si ya no nos podemos fiar en nuestro primero y supuestamente pulcro primer mundo de lo que tenemos al alcance de nuestras manos en las estanterías de los supermercados, estamos totalmente desprotegidos, porque a la larga todos la vamos a palmar por una alimentación inadecuada, no por escasez o penuria, como sufren en el mal llamado tercer mundo sino porque se ha desvirtuado totalmente el concepto de alimentación sana y saludable. Me río yo de la dieta mediterránea: pesticidas, nitratos y fertilizantes ya están a granel en (casi) todos los productos vegetales. Que se lo pregunten sino a cualquier agricultor del océano de plásticos de Almería utilizando una profusión escandalosa de productos fitosanitarios... Incluso Bruselas autoriza un porcentaje máximo de pesticidas en los alimentos, al parecer un 5%! Nos están envenenado la vida en su sentido más literal. ¡Viva el libre mercado y la posibilidad de sacar un máximo de beneficio envenenado al prójimo! Si encima tenemos que a los cerdos se les da de comer (por cambiarles la dieta un poco, que no se coman siempre lo mismo) maíz transgénico enriquecido con melamina, apaga y vámonos. Además, ¿dónde está esa carne de cerdo transformada, reembalada, retransformada en hamburguesas, salchichas, chorizos, salchichones y demás? Vivan las etiquetas que no dicen nada. Niño, cómete el jamón y calla la boca.

Las abuelas siempre dijeron que del cerdo se aprovechaba todo. Vamos a tener que cambiar esa frase para siempre jamás... Sniffff... snifffff...

domingo, 7 de diciembre de 2008

No a las bolsas de plástico


Una de las ventajas (una más de las muchas) de haber vivido tiempo en países extranjeros algo más civilizados es la de que las costumbres de orden ecológico se adquieren con unos cuantos siglos de adelanto con respecto a este país de pandereta en el que vegetamos. Y una de las costumbres que practico desde hace ya casi veinte años es la de no tomar nunca una bolsa de plástico de las tiendas donde voy a comprar. Lo más curioso de todo es que cuando la cajera de turno se pone instintivamente a meter mis artículos en las bolsas y le digo "No quiero bolsas, gracias", se para en seco y me mira normalmente con ojos como platos, porque no entiende que alguien pueda negarse a llevar la compra en ellas, tal es la mentalidad de que lo "normal" es precisamente eso. Entonces, empiezo a meter los artículos en unos de los varias bolsas de tela que llevo en mi bolso de mano o si se trata de una compra más importante, en mi carro de la idem. Luego se le ilumina la cara a la cajera, me mira y me suelta "Ah, claro! si todo el mundo hiciera eso". Le falta decir que así a ellas no se le estropearían las uñas al meter los salchichones y los packs de yogures en las bolsas.
Bromas aparte... ¿A alguien se le ha ocurrido pensar alguna vez la cantidad de miles de millones de barriles de crudo que se necesitan para fabricar esas bolsas (ya no sólo a nivel de Ejpañistán, sino a nivel del mundo mundial)? Luego nos quejamos del precio del litro de combustible cuando vamos a repostar. ¿Y la cantidad de euros que desembolsamos al cabo del año para pagarlas? Claro, es que el supermercado de turno incluye este gasto en sus precios de venta al público.. o ¿Alguien se había creído que nadie paga ese coste añadido cuando abre el monedero para pagar la compra de la semana?
En nuestro vecino país del norte, la decisión ya ha sido tomada. Los franceses dan un plazo ya definitivo de suprimir las bosas de plástico de aquí a tres años. Así lo ha afirmado el presidente de la federación de empresas del comercio y de la distribución. Desde esa entidad se estima que es el plazo necesario para "convencer a los clientes prever con antelación una cesta o una bolsa reutilizable". Aunque es cierto que determinados departamentos galos (lo equivalente a una provincia nuestra) ya se han prohibido desde hace algún tiempo y lo he podido comprobar en algunos centros comerciales a los que he ido en mis últimas visitas a Francia. No es que no tengan bolsas, que sí que las hay, sino que aquél que las quiera, que las pague. Y es muy habitual ver a los clientes bolsa de tela o reutilizable en mano, cuando van a la compra.
Esta medida ha sido anunciada muchas veces desde Bruselas, pero nunca antes se había puesto normativa alguna y sobre todo, fecha de aplicación obligatoria. Se entiende con esta nueva ley suprimir totalmente las bolsas de plástico de las cajas. De hecho, ya ha habido unos intentos anteriores, de parte de determinadas cadenas de hipermercados que ha hecho reducir en un 80% el número de bolsas ofrecidas al consumidor.

Bueno, por partes, como decía Jack el Destripador... Las grandes cadenas de distribución se están marcando un tanto. El objetivo es supuestamente ahorrar y hacer ahorrar al consumidor. Pero lo que dudo mucho es que ellos rebajen sus márgenes de beneficios a costa de rebajar sus precios, bajo pretexto que ahora ya no invierten en comprar toneladas de bolsas. Nos lo meterán "con queso" por otros medios. Una empresa no es una ONG. Y su razón (única, diría yo) es la de crear beneficios con su actividad. Lo contrario es de gilipollas. En eso se basa la economía de mercado. Y si no, miren a ver quién paga la publicidad (no deseada) que nos encontramos en los buzones de correo a diario... Por otra parte, ¿no es demasiado extraño que existiendo la posibilidad de fabricar bolsas biodegradables, sigan sin reemplazarlas por la otras que no lo son? Cuando estuve en los EEUU, en un mes que estuve comprando en el super de Urbana-Champaing, en todo momento nos daban la compra con bolsas de papel, de esas que se ven en las películas, marrones. Y eso fue en el 91... Cuando fui a Irlanda en el 2005, tampoco vi asomo de bolsas de plástico por ningún sitio. En Alemania cuando fui la primera vez en el 94, brillaban por su ausencia, en Suiza ni digamos, en Bélgica hace ya dos años que están prohibidas y en Austria este mayo pasado, ni por asomo...
Porque digo yo, a ver... Si lo de las bolsas de plástico tiene aproximadamente unos 35 años, ¿qué se hacía antes? ¿Nadie se acuerda de que nuestras madres y abuelas iban a la compra con una cesta de las de toda la vida? Nos hemos hecho tanto a verlas que ya creemos no podríamos prescindir de ellas. Las bolsas de plástico son caras, no biodegradables y no reciclables... Todo son argumentos en contra. ¿Además alguien se ha parado a pensar la cantidad de embalajes que le ponen a todo en las grandes superficies? Sin ir más lejos, dejé de comprar muchos artículos en Mercadona por la cantidad de bandejitas, envoltorios de celofán y mil gaitas más que les habían empezado a poner. Ya no hay, por poner un ejemplo, zanahorias a granel. Si quieres tres zanahorias para un guisado, tienes que arramblar con la bandeja de medio kilo o irte a comprar a la frutería de la esquina, que de hecho es lo que hago. ¿Y las bandejitas de marras de la carne? Simplemente, me basta con ir a mi carnicero de toda la vida, el que está en mi barrio, que me conoce por mi nombre, y sabe cómo me gusta la ternera o el cordero, y me lo vende sin tanto "peso extra".

Otra cosa, me pregunto ¿por qué dan un plazo de TRES años ¡tres! para retirarlas del mercado? Digo yo que en tres meses, y ya sería mucho, podría ponerse la gente al corriente para empezar a ponerse las pilas con el tema. Si fuimos capaces de hacerlo para el tema del euro en sólo veinticuatro horas, esto debería ser mucho más fácil, no? Debe ser una maniobra del lobby de los fabricantes de bolsas para que no se vayan al garete en un pis-pas. Porque la primera vez, vale, se te ha olvidado la bolsa en casa. La segunda, dices ¡ayssss!, pero a la tercera, te echas unas cuantas bolsas en los bolsillos o en el bolso y listo. Yo llevo siempre unos cuantos de diferentes tamaños en el maletero del coche y los voy reponiendo cuando se quedan en mal estado.
Pues eso, yo ya estoy preparada para la vida moderna, o mejor dicho, para la vida sin bolsas de plástico... Eso que llevo de adelantado!

jueves, 4 de diciembre de 2008

El otro "calvo" de la lotería


Este tipejo no sólo no es calvo (al menos no totalmente), sino que tampoco es manco...
Felices fiestas a tod@s.

martes, 2 de diciembre de 2008

El chiste del día




Se levanta el telón. Aparece George W.Bush y dice "Lo siento, estaba equivocado sobre el tema de las armas de destrucción masiva". Se cierra el telón. ¿De qué película se trata? Y no, no es "Catetos a babor". Que cada cual le ponga el título más estúpido que le venga en gana.

Tendría su cierta gracia si no fuera porque estamos hablando de un tipejo que ha estado ocho (¡ocho!) años al frente de la nación más poderosa del mundo, y que fue incluso reelegido. Manda güebs, que diría Trillo. A un par de telediarios de mudarse de casa, es hora de hacer (tristes) balances. Ah! Y con toda la desvergüenza del mundo, de hacer confesiones. Como ésta: "Pienso que no estaba preparado para la guerra". Y aún hay más... "lamento profundamente haber creído en informaciones falsas sobre las armas de destrucción masiva"... Re-manda güebs... Más que nada porque precisamente ése era el único argumento sobre el que se sostuvo la invasión a Irak, allá en el 2003. A la pregunta de si habría atacado ese país si hubiera sabido que no las había, este pedazo de cretino no ha sabido que contestar.

Pues sí, cientos de miles de americones e iraquíes muertos para nada. Ese es el triste balance de cinco años de devastación, de terribles noticias diarias de ataques suicidas, bombas, atentados y miseria. Es el único responsable del estigma al pueblo iraquí. El mundo entero juzgará a este mentecato un día no muy lejano por crímenes contra la humanidad. Porque ésta es una confesión en toda regla de alguien que no ha sido capaz de llevar dignamente el título de jefe de la nación más poderosa del mundo. La fijación (llámenla paranoia) de los Bush, padre e hijo, que tanto da, ha sido siempre la de dispensar a partes iguales moral baratera y muerte sin tener las capacidades de asumir las meteduras de pata y su consiguiente peligrosidad en política internacional. Nada, absolutamente nada podrá disculpar los asesinatos cometidos por Sadam, pero tampoco valdrá ninguna excusa para los asesinatos ordenados por Bush. En qué quedará Irak cuando las tropas norteamericanas se retiren en el 2012 (fecha publicitada hace unos días como más o menos definitiva). ¿Cuántos muertos serán necesarios todavía para poner en pie lo que ha hundido la administración de este petardo inútil en ese ya de por sí país de miseria? ¿Para cuándo los asesinos profesionales que pululan en las calles de Bagdad, rodando entre risitas películas "snuff" serán juzgados y condenados?

Es tan estúpido y necio el Bush este que ha tardado 8 años en darse cuenta de su error. De hecho su campaña presidencial de 2004 se basó en la lucha que iba a librar contra el terrorismo internacional. Se vendía con la excusa que estaba mucho mejor preparado que su oponente John Kerry. Bush empezó su mandato mintiendo y lo termina... mitiendo. Ha sido la marioneta perfecta que querían los neo-conservadores para llevar a cabo su sucia guerra. Y como si eso no bastara, este pedazo de alcornoque tenía convicciones que le han llevado a afirmar que Dios en persona le había inspirado su decisión (la de atacar Irak) y su carácter obstinado hizo el resto. Antes de llegar a la presidencia, recordemos que era un hombre de negocios mediocre de Texas, y cuyas empresas habían suspendido pagos una tras otra. Ya hemos visto el empeño que pone en todas sus iniciativas.

Sólo otros mentecatos como él fueron capaces de apoyarle. La famosa foto de las Azores será la prueba irrefutable para siempre jamás que nuestro país estuvo de acuerdo con esos sanguinarios afanes de notoriedad. Y para Bush, los demás países representaron unos cobardes despreciables. Su concepto infantil y simplista de los "buenos" y los "malos" le harán entrar en la historia de los peores presidentes del mundo, equiparándolo a los peores dictadores.

lunes, 1 de diciembre de 2008

¿Qué será lo próximo?


Estos días una nueva propuesta de ley ha armado un revuelo sin precedentes en nuestro vecino galo. Al parecer se está a punto de presentar una propuesta de ley para permitir que los menores de hasta doce años puedan entrar en el sistema carcelario, una vez sean juzgados y condenados. Se está considerando si un menor de doce años es o no responsable de sus actos, y si éstos cometen un delito, que sean juzgado como un adulto.
El ya de por sí panorama revuelto de la justicia francesa no acaba de encontrar sosiego. La ministra Dati (bastante polémica ya de por sí, por temas ajenos a su ministerio) la está armando, y gorda...
Los jóvenes delincuentes podrían ingresar en prisión próximamente. Es lo que se desprende de un estudio hecho público por una comisión encargada de velar por la justicia de estos inadaptados sociales y que se votará dentro de dos días. Al parecer se pretende renovar y adaptar a los cambios sociales unas leyes sobre los menores delincuentes del año 1945. Se pretende dotarles de responsabilidad penal a partir de esa edad. Hasta ahora, no había edad penal mínima, ya que se estudiaba caso por caso en función del "discernimiento" del chaval. En otros países europeos, la edad penal está fijada a partir de los 14 años, en otros a los 16.
No es que los chavales hayan cambiado, en realidad, lo que ha cambiado, y mucho, es el contexto económico y social. En realidad, la delincuencia entre la chavalería no ha aumentado, sigue configurando la misma estadística que hace décadas.

Absolutamente alucinante... Yo lo que creo es que un adolescente, que está en plena construcción de su personalidad, no es consciente de sus actos. Es un ser incompleto, ambiguo y ambivalente, aunque también es cierto que hay chavales que pesan más de setenta kilos y miden 1,70m y son verdaderos asesinos en potencia. Muchos de ellos, reincidentes. La sociedad ha cambiado, decía, y por eso las leyes deben evolucionar a la par. Pero los jueces seguirán aplicando las leyes, los abogados seguirán defendiendo a sus defendidos, las asociaciones seguirán reivindicando los derechos humanos ... El que un nene de esas edades vaya a parar a la cárcel no va a solucionar nada. Es más, si nos ponemos con esas, pronto tendrán que ponerle una pulsera de esas electrónicas a los bebés de cuna... Y ya puestos, por qué no poner rejas en todas y cada una de las puertas y ventanas de cada uno de los edificios del país? Y rondas de vigilantes que las cerrojen cada noche a las nueve para volver a abrirlas al día siguiente a las siete de la mañana? De esta forma, cuánta más hipocresía haya en el ambiente más tranquilas estarán las conciencias de algunos. Con la demagogia rampante se construyen los países del primer mundo, sí señor... Qué será lo próximo, la vuelta al cinturón de castidad? Viva el liberalismo a ultranza. Porque los chavales que estén en el punto de mira no será precisamente aquellos que viven en los barrios acomodados, que se han educado en carísimos centros privados, que reciben cheques de muchos ceros por su doceavo cumpleaños...

Dudo mucho que alguna vez esta ley llegue a aprobarse y siquiera a aplicarse. Déjenme que tenga al respecto serias dudas. Aunque visto lo visto en el Reino de la Gran Bretaña, en dónde existen correccionales, cuyo funcionamiento recuerda en mucho a las cárceles, los críos pueden ir a prisión a partir de los 10 años! No hace falta recordar a raíz de qué escalofriante suceso se modificaron las leyes en este sentido. No me vale que ya se aplique en otros países. Lo que sí es necesario es que se apliquen medidas persuasivas, no a los niños, sino a los padres para que paguen los destrozos cuando sus vástagos han cometido fechorías (con documentos gráficos al apoyo). Ya está bien de la honestidad del ciudadano medio que debe pagar su parte del pastel de forma automática. Los impuestos no deben servir para este tipo de menesteres. Son los padres de un menor responsables primeros y últimos de todo cuanto hace (o deshace) el hijo. Da igual que el chaval se escude en que como es demasiado joven para que se le aplique la ley del menor, quedará impune. Que los progenitores apechuguen con las consecuencias. Si no se hace aquellos que es de ley que hagan, que el peso de la ley recaiga sobre ellos.
Porque volvemos al eterno problema de base que ya he mencionado en alguna ocasión. Hace no demasiado tiempo, la autoridad del padre o el profesor bastaba para poner en solfa a un crío díscolo. Hoy en día, el profesor está atado de pies y manos y ya no tiene derecho más que a dar sus clases y a esperar que en el mejor de los ambientes. Puede manifestarse tanto como le dé la gana en la calle, de hecho estos días en Francia, ha habido buena profusión de ellas. Pero en las aulas, es el último mico. En esas condiciones, ¿cómo puede un chaval encontrar un marco, un límite no transgredible cuando son los propios padres los que les apoyan muchas veces en esas mismas transgresiones? ¿Por qué no les enseñan esos mismos padres laxistas que hay límites que no deben traspasarse y que hay una autoridad que respetar? Muchos de estos chicos (porque en su mayoría son chicos varones) aprender por sí mismos que lo que les vale es la ley del más fuerte, el que pega primero, el que se envalentona frente a sus amiguetes cuando hace algo prohibido... En caso contrario, estoy totalmente de acuerdo en que se aplique la ley y se castigue, pero en los padres, no en los chavales. Nadie dice que cosas de este tipo queden impunes. Es sólo que ya se ha demostrado con creces que la cárcel, aún en un adulto no es precisamente la mejor de las soluciones, y menos con niños de esas edades. El juez Calatayud es un ejemplo de que se puede aplicar la ley de forma individualizada y con resultados muy positivos para los menores. Con trabajos para comunidad por ejemplo. Lo siento, pero un chaval que ha robado un bolso mediante un tirón porque no ha recibido una educación adecuada, que ha crecido comiéndose los mocos de pobre, que está constantemente expuesto a una sociedad de ostentación de riqueza cuando ni él ni su familia no tienen donde caerse muertos, es mil veces menos culpable que un tío inconsciente que circula a 200km/h por la autovía por el placer de demostrar que es un macho muy macho, porque él sí es un adulto (supuestamente) formado y responsable de sus actos. El mismo hecho de presentar esta propuesta demuestra muy bien que hemos fracasado, que ya no somos una sociedad del bienestar, sino una panda de individuos aíslados y desgraciados. Una ley semejante es un insulto a la democracia y a los principios fundamentales de la ética y del sentido común. Este medida, de aplicarse, abre la puerta a todo tipo de abuso, es totalmente intolerable.

Meta a un niño en prisión, saldrá hecho un monstruo.

viernes, 28 de noviembre de 2008

La violencia




















Acaba de publicarse un estudio que analiza la violencia en la sociedad francesa. Y el primer dato escalofriante desvela que la mitad de las víctimas de violencia lo son en el marco del hogar. Un 5% de los franceses de entre 18 y 60 años (más de millón y medio de franceses) han sido alguna vez en su vida víctima de violencia dentro de su propia familia. Fuera de estas cifras queda las estadísticas del policía con respecto a delincuentes.

Se trata de violencia sufrida por las mujeres... pero también por los hombres. Y estas cifras sólo conciernen los años 2006 y 2007. Por sexos, las estadísticas son similares, en torno al 5%, aunque la naturaleza de estas violencias así como el autor de éstas varía mucho. Con respecto a los hombres más de un 70% las han sufrido fuera del hogar. El dato inverso lo arroja lo concerniente a las mujeres: 80% han sido agredidas en el marco de su entormo más íntimo (vecino, colega de trabajo, padre) y 60% por un compañero sentimental. También nos habla de las edades en las cuales se dan más. A partir de los 25 años, las violencias disminuyen en ambos sexos, aunque siguen ganando por goleada aquellas sufridas por mujeres.

El paro aparece siempre como un factor explicativos de las violencias conyugales: 4% de las mujeres paradas declaran haber padecido violencias por parte de sus parejas. Y esa cifra se dispara si ambos están sin empleo. Otro factor determinante viene dado por familias monoparentales. Y finalmente, vivir en zonas socialmente desfavorecidas es un riesgo añadido. Desgraciadamente, el número de denuncias no se ha incrementado exponencialmente con respecto a las víctimas.

Bueno, ya sabemos lo que se dice popularmente sobre las estadísticas: si yo tengo dos jamones, y tú no tienes ninguno, las estadísticas afirman que ambos tenemos uno... Cuando se realizan estudios sobre lo que sea, se llevan a acabo sobre un número determinado de personas, no sobre el total de la población. En este caso se han interrogado unos mil individuos, con criterios muy definidos, pero no deja de ser alarmante el creciente número de víctimas de violencias, hombres o mujeres.

Y digo yo que también podrían haber incluído aquellas violencias infligidas en la carretera (6000 muertos al año no es moco de pavo). Circular como un degenerado en un coche, con los riesgos que eso comporta (muerte de niños -mira, precisamente la nueva campaña de la DGT retoma ese asunto espinoso-, de personas) debería asimilarse a un tipo de violencia ya que se trata de un afán dominador animal, tanto como aquel sobre la pareja, que en la mayoría de casos es más débil físicamente. Me pregunto si no se debería asimilar lo uno a lo otro.

Lo que tampoco se menciona son los niños. Cuántos son víctimas inocentes en el seno de su propia familia? Cuántos son víctimas de violencias por parte de padres que se ven desbordados y sueltan sus propias dosis de violencia por tener una vía de escape a sus propias frustraciones? Lo de la "bofetada a tiempo" es un mito. Porque nos dan la paliza con los abusos a menores por parte de pederastas día sí, día no. Porque los monstruos pederastas son eso, monstruos, pervertidos, pero y los padres que abusan de sus hijos?... Ah! que eso es tabú! Esa es otra cuestión que no se quiere abordar. Forma parte del ámbito familiar íntimo. De eso no hay estadísticas? Hoy es día es cosa probada que el niño que ha padecido en su infancia malos tratos y violencias tiene todas las papeletas para ser un adulto violento; delincuente en su adolescencia y posteriormente adulto inadaptado, incapaz de controlar sus impulsos. Esto quizás explicaría en parte las tasas de delincuencia, especialmente la de jóvenes. Probablemente, las cifras superan en mucho el 5% de estas estadísticas. Estoy segura.

Y los ancianos que padecen violencias encubiertas? Y los minusválidos? Las personas que son más débiles son más propensas a padecer violencias varias. Aquellos que no pueden denunciar, que son débiles, que no podrán defenderse ni testimoniar nunca... Excepto la punta del iceberg que salta de pronto a la actualidad cuando ya no hay solución: muerte de niños a manos de sus propias familias, torturados, martirizados, ignorados... La gente pasa al lado, evita mirar cuando un padre le pega a su hijo en plena calle una sonora bofetada. Eludimos en gran medida nuestra responsabilidad social, con la excusa de que es algo que no nos concierne, que no nos afecta. Sin embargo, esa misma gente es la que cuando ve esa misma noticia en los informativos ponen el grito en el cielo. Yo no me muerdo la lengua, porque he vivido eso y porque en esta sociedad tan policializada en la cual se le remueven a uno las tripas cuando hay un llamamiento de los medios de comunicación, me provoca náuseas por su hipocresía. Estamos inmersos en una sociedad de la apariencia. Lo que no nos afecta directamente, nos resbala. Y cuando nos afecta de lleno, nos sentimos únicos protagonistas en el universo, y entonces removemos cielo y tierra para atraer la atención del resto del mundo.

No quisiera dejar de abordar también otro tema tabú: cada vez más a menudo hay hombres víctimas de violencias física y psicológica por parte de mujeres. En otros países como Estados Unidos o Reino Unido ya existen campañas de sensibilización en los medios de más amplia difusión, con teléfonos de atención y organismos de apoyo. ¿Para cuándo la creación de algo similar en nuestro país? Habría que arremangarse para resolver estos problemas pero en un nivel de mentalidades e individuos, poniendo en marcha prevención de la de verdad, no de animación cultural angélica. Convendría analizar en profundidad todos aquellos factores que inciden en el aumento de la violencia, sea del color que sea (fracaso escolar, machismo estructural, afirmación compensatoria por la violencia, crisis económica y del empleo, desarraigo social y un larguísimo etcétera. Uno de los quid de la cuestión es la relación existente entre el poder y las formas de expresión a disposición de las personas.

Vivimos en un entorno en el cual los esquemas como el valor de la familia, del trabajo se han visto sacudidos, en el cual nos meten por los ojos referencias falsas como duros de seis pesetas, léase juventud y belleza eterna, éxito material, potencia sexual y libido obligatorias) la violencia es el modo de expresión de los débiles. En ayunas y empapados en sustancias inhaladas o ingeridas. ¡Qué triste!

A veces, me sorprendo a mí misma comprobando que, apesar de todo la inmundicia que me rodea, soy todavía capaz de sentir compasión hacia aquellos que sufren a pesar de las grandes dificultades en las que me muevo. Que siento tristeza por aquellos que padecen injusticias, que me conmueve el sufrimiento de personas ajenas a mi vida. Me congratulo de tener una vida digna, que estoy viva, que soy capaz de sentir emociones. Y que me conmueve el dolor ajeno...

martes, 25 de noviembre de 2008

Un payaso del Caribe


No perdería ni cinco segundo de mi tiempo hablando sobre este dictador mequetrefe de tres al cuarto de no ser porque el pasado finde se celebraron elecciones para elegir a los gobernadores, alcaldes y diputados en Venezuela, perdón en la "República Bolivariana de Venezuela!".
En un país en donde la carencia de bienes materiales es considerada por este tipejo como un mal menor mientras le entran los dólares esos de los que tanto reniega por el petróleo que saca de sus pozos, los resultados finales de estos comicios regionales le deben haber sentado como un tiro, ya que si bien sus secuaces han ganado en los núcleos pequeños, la avanzadilla de la oposición gana adeptos cada vez con más fuerzas en las grandes ciudades. De hecho debe ser por eso que prohibió la venta de alcohol durante en fin de semana, no fuera a ser que la gente se emborrachara y no le votara... Aunque estas elecciones no son para renovar a Chávez en persona como presidente, la oposición denuncia que se ha prodigado demasiado en la campaña electoral. Los electores se han estado quejando que se han dejado a un lado los problemas reales del país (como por ejemplo que la recogida de basuras se ha paralizado y se amontonan toneladas de inmundicias por las calles o la alarmante creciente inseguridad merced a los secuestros express) y se ha puesto demasiado el acento sobre el nuevo socialismo del siglo XXI demasiado teórico. De hecho Caracas se ha convertido estos últimos tiempos en la ciudad más peligrosa de América Latina en cuanto al número de agresiones y asesinatos que son cometidos a diario.
No quisiera ser agorera, pero voces críticas señalan que Chávez fue elegido para "reinar" hasta el fin de sus días, que ya no habrá más elecciones. Y es el resultado de una situación en la cual los medios de comunicación han obrado con una eficacia proverbial teniendo en cuenta que aquellos que no obedecen consignas chavistas son "decapitados" ipso facto. Las palabras "autoritarismo, populismo, dictatorial" no son bienvenidas. Aunque ya lo decía el tristemente célebre Goebbels: "Para que una mentira se convierta en verdad, basta con repetirla mil veces".

La situación actual en aquel país es poco menos que desesperada. Imagínense que para que un venezolano se plantee salir al extranjero, se le exige un mínimo de 4000 €. Dramático si no fuera porque al frente de la gestión nacional tienen a un payaso que se dedica a invitarse a las televisiones e interrumpir programas de televisión cuando y dónde se le antoja. Este tipejo es el paradigma del nepotismo más brutal, habiendo enchufado a todos sus familiares en puestos clave del gobierno y de su administración: padre gobernador, hermano alcalde, otro hermano ministro... Es normal para una república bananera que amenacen de muerte a aquel trabajador que vota contra el mequetrefe. Son sólo algunos ejemplos de la corrupción y el autoritarismo de un régimen que supuestamente es socialista, como lo cacarea cada vez que abre la bocaza el capullo este. ¿Pero se puede saber dónde leches mete todo el dinero que saca del petróleo? Ah! que a ver si es que se ha ido de rebajas a la última feria de armas soviética. Y mientras, los venezolanos sin pensiones, sin seguridad social, sin ayudas sociales... en la pura miseria económica y moral... con sueldos que no llegan a los 200€ al mes! Esto es el paradigma de una república petro-bananera! Sus once años de mandato han dado para mucho, y no hablo sólo de aquél ridículo que hizo frente al rey. Es un elemento que negocia con las FARCS, el negacionismo, el clientelismo descarado, el antisemitismo y cuya política pseudo-socialista no ha hecho más que cavar todavía más el abismo entre los ricos y los pobres, favorecer la corrupción y la violencia y que para más inri mantiene unas relaciones idílicas con dirigentes islamo-fascistas iraníes. Una cosa es segura, estos tipos (Chávez, Castro y compañía) están escribiendo páginas vergonzosas de la historia contemporánea, aunque ellos se justifiquen descaradamente
Sólo espero que la historia juzgue este individuo (y otros de su calaña) como se merece(n), es decir declarándole(s) culpable(s) de crímenes contra la humanidad.

lunes, 24 de noviembre de 2008

¿Pero qué c*ñ* estamos haciendo mal?




Iba a hablar hoy de las elecciones en Venezuela y a poner a caldo a Chávez, pero acontecimientos recientes me ha hecho aplazar a mañana el tema, para comentar algunas reflexiones de esas de las mías, retóricas... o no. O que las comente quien tenga más ideas que yo, porque a mí concretamente sobre este tema, no se me ocurren ninguna.

El viernes me sorprendió la sirena de una ambulancia en medio de una de mis clases en el insti. Con la lógica curiosidad y preocupación, me asomé a la ventana, pensando que había ocurrido algo que requería de su presencia en los aledaños del centro, pero cuál fue mi sorpresa cuando vi que se encontraba en el patio de entrada mismo. Una hora más tarde, me enteraba de que una niña había ingerido unas cuantas pastillas en el baño y le había dado un mareo. Asustadas, las amigas habían llamado al jefe de estudios y éste al 112 y a la madre. (La niña en cuestión está en tratamiento por depresión -¡a estas edades!- y tiene 14 años).

Pues bien, esta mañana tenía un examen con los alumnos de 2º de eso y al pasar lista, una niña faltaba. Se trata de una niña con bastantes problemas confesados por la madre y por ella misma. Absentista ocasional, mentirosa compulsiva y manipuladora. No es la primera vez que falta a un examen. Pero esto es lo de menos. Al hablar con la tutora, y dispuesta a llamar enseguida a la madre, me quedo de piedra cuando por toda respuesta me pone delante de los ojos un parte de ingreso en urgencias de anoche a nombre de la niña y con un diagnóstico estremecedor. La niña se tomó anoche la friolera de setenta pastillas diferentes.

Un intento de suicidio en un/a adolescente no es nunca una conducta anodina y por supuesto no se puede caer en el error de achacarlo a una "crisis de adolescencia". No debería ser banalizado, aún cuando los medios para llevarlo a cabo nos hagan pensar que no había peligro alguno. Además de las complicaciones médicas potencialmente mortales a corto plazo, el riesgo principal es la prolongación de una dolencia que puede eventualmente expresarse en un nuevo intento. De hecho en más de 20% de los intentos de suicidio existe una patología psiquiátrica subyacente (depresión, trastornos severos de la personalidad) que favorecen dar el paso. Ah! Y el suicidio es la segunda causa de muerte entre jóvenes de entre 15 y 25 años... Como para cerrar los ojos a esta realidad.

No hay duda de que aquí ha actuado un efecto "imitación o contagio". Porque a sólo tres días de ocurrir el primer intento, no incurre ningún otro factor. De hecho se enteró toda la comunidad educativa, y muchos alumnos, mucho antes que los mismos profesores. Pensamos que los niños no se enteran de las tragedias, aún cuando ponemos mucho empeño en ocultarlas, pero los críos no son tontos, no se chupan el dedo. Serán muy vulnerables, es cierto, pero no son estúpidos, como muchos padres se creen. Cierto es que en la sociedad de la información en la que estamos inmersos, los medios no se cortan ni medio pelo a la hora de dar detalles escabrosos de hechos tan dramáticos de este calibre. Y claro, luego nos quejamos. El suicidio no es una "solución posible", sino una decisión trágica de alguien que no ha encontrado una salida. Y es que el mundo está cada vez más "ido". No puede ser que los suicidios (o intentos) hayan aumentado de manera tan alarmante en la U.E.

¿Qué estamos haciendo mal? ¿Qué coño puede estar pasando por la mente de una de estas criaturas para dar ese paso tan estremecedor? Y es que los adolescentes, antes de dar este terrible paso, ya han dado muestras de sus intenciones, de sus frustraciones, de sus "males interiores", para que en casa no se hayan dado cuenta. ¿Es que nadie ha notado, percibido, las "señales" que a veces son descaramente claras que emanan de estos seres frágiles? ¿Convendría evaluar el equilibrio mental de sus progenitores para entender los motivos que han llevado a esta ruptura con el mundo? ¿En serio es tan estresante la vida de algunos padres que no pueden dedicar atención a sus hijos en vez de darles todo lo materialmente posible? ¿Acaso no son capaces de transmitir a sus hijos la ilusión por vivir la vida lo más plenamente posible? ¿Darles herramientas para que puedan afrontar los fracasos con sabiduría? ¿Aprender a amar y a amarse?

No sé qué coño está pasando....

lunes, 17 de noviembre de 2008

Viajar


Esta es una vista de la Estación de Atocha, en Madrid, a las once de la mañana de ayer domingo. Exhuberante de vegetación y muy animada de gente.

Por cierto, saludos a Ana María, Javi y Charo, Jose, Domingo, Eva, Mónica, Raquel, Alberto, Charo, Susana...

jueves, 13 de noviembre de 2008

El triunfo de lo imperfecto



Este post podría titularse "La venganza de la verdura casera" pero he preferido llamarlo "El triunfo de lo imperfecto". Y me explico. Al parecer en Bruselas quieren suprimir las normas (leáse "calibre") de algunas verduras. Las zanahorias torcidas, los melones no demasiado redondos o incluso los pepinos demasiado curbados podrían estar pronto de vuelta en las estanterías de lo supermercados europeos. En nombre del prosaico nombre de "Menos burocracia", la Comisión Europea ha decidido que ya no habrá calibres fijos y otras normal comerciales que se sigan imponiendo a las frutas y las verduras. Con este objetivo, debe realizar una consulta a los países miembros estos días. ¿Pero el consumidor ganará algo en toda esta historia? Actualmente, en el mundo sin piedad de las normas comerciales europeas, para tener el derecho de figurar en los expositores de las grandes superficies, las frutas y verduras deben reunir unos ciertos criterios de color, forma, tamaño o incluso de calibre, de manera que puedan ser clasificados en una de las tres categorías prevista en una escala de calidad. De esta forma, los que son demasiado pequeñas o demasiado grandes, no lo suficientemente esféricos o demasiado largos terminan sus días en el mejor de los casos en confitura, puré o salsa. Y en el peor de los casos se tira directamente a la basura. El caso es que con el alza de los precios de la alimentación, es totalmente absurso tirar estas frutas y verduras sólo porque su aspecto no se identifica con unos parámetros estéticos de dudoso rigor alimenticio. De hecho, los precios podrían abaratarse sólo por este motivo. Y es que los cánones de belleza se pagan. La Comisión propone pues suprimir las normas estético-comerciales de 26 tipos de fruta y verdura sobre los 36 que componen la lista que se enmarcan en una reglamentación vigente hasta ahora. Para los diez restantes, como las patatas, las manzanas, los limones, los kiwis, las fresas o los tomates, la Comisión mantiene las normas comunes, pero sugiere autorizar su puesta a la venta al consumidor con una etiqueta que indica que están destinados a la transformación. Conclusión: menos despifarro y precios más bajos. ¿Qué más se puede pedir?
Aunque no todo es de color de rosa. Porque por su parte, los agricultores no opinan que sea una idea demasiado buena ya que creen que van a proliferar normas privadas, específicas de cada país o región productora. De hecho, afirman que serán las grandes cadenas de distribución las que impongan sus propias normas.

En realidad, nunca he creído que las verduras estéticamente uniformes fueran de mejor calidad que las de look imperfecto. De hecho, me parece escandaloso que por no responder a unas "normas" o "calibres" se hayan desperdiciado tantos productos. Así que una de las ventajas es que, y en estos momentos de crisis más todavía, se va a aprovechar por fin aquello que hasta ahora se tiraba gratuitamente. Ya está bien de tonterías. ¡Viva la zanahoria deforme, el pepino imperfecto, el tomate jorobado! ¡Y viva la diferencia y el buen sabor de antaño! De hecho, la gente que tiene un huerto lo sabe perfectamente. No hay nada como el sabor de una manzana cogida de un huerto y saboreada horneada o cruda, al gusto del consumidor. Por una vez que a Bruselas se le ocurre una idea estupenda, aplaudamos la iniciativa. ¡Fuera los tomates clónicos, abajo las berenjenas que parecen hermanas gemelas con la de al lado! Con los concursos de belleza de los venezolanos, ya tenemos bastante tontería como para dejar que eso se siga extendiendo al mundo del vegetal. Me gusta que las cosas sean únicas, especiales, particulares... Que ninguna se parezca a la de al lado. Todos sabemos que la naturaleza es diversidad. Basta ya de los productos de supermercado supuestamente "bonitos" pero carentes de sabor. Volvamos a las explotaciones modestas con formas de cultivo tradicionales, que producen lo de temporada, sin añadiduras químicas aberrantes. El sabor de un producto es señal de su riqueza en principios activos realmente nutritivos. Cabría revalorizar, incentivar y recompensar a las explotaciones pequeñas, de la huerta de al lado de casa en detrimento de las mega-superficies. ¿Para cuándo una revolución del mundo de la producción contra el monopolio de estos dicta-distribuidores? Hay que renunciar en masa a los pesticidas y otros productos químicos que arruinan la salud, las tierras y las finanzas. Hay que rechazar la "normalización" en nuestros platos. Reduzcamos la cantidad de comida en beneficio de la calidad, del sabor, de la diversidad. Vayamos lo más posible hacia lo natural. Vivan las verduras de todas las formas y los sabores. Abajo las comeduras de coco concernientes a las formas establecidas.
Cuando voy a la verdulería de mi barrio, prefiero comprar aquellos productos que no son clónicos. Me imagino que tienen menos fertilizantes. Siempre me ha tirado p'atrás lo bonito, lo brillante, lo liso, lo sin mancha, lo correcto, lo limpio y sin duda alguna todo el gasto extra que va detrás. De hecho, esto me ocurre igual con las frutas y verduras como con la gente. En general, se suele fijar más la gente en aquellas personas que nos llaman visualmente la atención y el resto se tira a la basura. Pues yo prefiero aquellas que son especiales, imperfectas, únicas, pero con un sabor entrañable, sincero, sin artificios. Una manzana con un pequeño arañazo puede saber a gloria; una patata no tratada puede ser el mejor ingrediente para la mejor de las tortillas de patatas... Y para aquellos que me protestarán diciendo que no se puede pelar facilmente una zanahoria imperfecta de formas, les diré que les pregunten a sus madres o abuelas, a ver cómo lo hacían años ha con utensilios de cocina que eran bastante más imperfectos que los que abundan en nuestras cocinas hoy en día.
Lo dicho, se impone una vuelta a lo natural.

P.D. Recomiendo el excelente libro de William Reymond "Toxic".

lunes, 10 de noviembre de 2008

Suma y sigue.... (o resta?)
















Hace tres semanas, apenas a cincuenta metros de mi casa, y cuando me dirigía al insti, un coche se empotró contra el mío y me destrozó las dos puertas laterales. Se había saltado una señal de stop. Era un chaval joven, de veintipocos años, que conducía una furgoneta de empresa. Tras el impacto inicial, bajé a evaluar los daños y vaya si mi tiburoncito gris se había hecho "pupa"... Lo dicho, estoy todavía sin vehículo a estas alturas.

En un lunes como hoy, en el que una semana más se va estableciendo un balance del fin de semana en materia de accidentes de tráfico, se me ocurren varias reflexiones.

¿Por qué los coches pueden circular a 200 Km/h. cuando la velocidad está limitada a un máximo de 120? No sería más sencillo fabricar coches menos potentes y con motores eléctricos, menos caros y menos contaminantes? ¿Por qué no existe un sistema de limitación GPS para regular la velocidad máxima de los vehículos? ¿Por qué hay tantos camiones en las carreteras pudiendo hacer circular las mercancías por tren? Existen soluciones, pero se prefiere inyectar dinero para socorrer a los fabricantes de coches, más que volverse hacia las verdaderas alternativas. Y detrás de todo ello, siempre los lobbies, los políticos no son más que marionetas. Y nosotros sólo escoria a granel y encima nos toca pagar siempre...

Seamos sinceros, la gran mayoría de los accidentes suceden por distracciones: el abuelito que sale del bar y arranca sin mirar, el burro que da media vuelta con su furgoneta sin poner intermitentes, el capullo que se da cuenta en el último momento que se le pasa su salida de la autovía y pega un volantazo... Creo que el problema no es tanto la velocidad como el estar al cien por cien en lo que se está haciendo en ese momento, que es conducir. Basta con dominar el coche y no que él te domine a ti. Y eso es lo que le pasó al chaval que empotró su camioneta de empresa en las puertas laterales de mi coche. Que cuando salió de su vehículo se echó las manos a la cabeza, como dándose cuenta de pronto de su torpeza. No atinaba a formular una explicación lúcida porque tenía la neurona de vacaciones. Lo único que pudo decir es que se le "había resbalado el zapato del pedal" (sic). A cada accidente con balance de muertos, se suele señalar del dedo la velocidad. Pero los verdaderos errores de conducción nunca se mencionan, y si se hace, se comentan en los siguientes términos: "con una velocidad menor, podría haberse evitado". Ciertamente. Obviamente, cuando se está parado, se corren menos riesgos; eso es de perogrullo. Aunque... el día de autos, a mí no me pasó nada, pero el tipo en cuestión desplazó mi tiburoncito a varios metros de distancia del punto de colisión.

Leo que ya existen en periodo de experimentación unos vehículos que funcionan a aire comprimido con unos consumos inimaginables en un vehículo convencional. Gastan la friolera de 1 ó 2 litros a los 100 y contaminan una ínfima parte de aquellos. Pueden incluso alcanzar los 130 km/h. (de momento). Pero no seamos demasiado optimistas. Éstos también tendrán accidentes. Y vuelvo a lo que comentaba antes. Los accidentes no se producen por los coches en sí, sino por el (mal) uso que se haga de ellos.

Por otra parte y volviendo al tema de los carburantes, pronto tendremos que decirles adios a esos monstruos 4x4 que chupan más que un vampiro y a aquellos vehículos que tienen tropecientos caballos. Las cuadras de equinos van a ganar en calidad aunque pierdan en cantidad. Y el medio ambiente, de paso. Los carburantes fósiles van a desaparecer, nos guste o no y mal que les pese a algunos. Además, en tiempos de crisis, la gente cada vez tiene menos dinero y se pensará muy mucho echar carburante a sus vehículos si no es extremadamente necesario. De hecho, observando hace unos días la entrada a uno de los polígonos de mi ciudad, me sorprendí agradablemente viendo la cantidad de gente que acude al trabajo en bici. Y aquí cabe plantearse muchas cosas y verlas bajo otro prisma. Nuestra forma de vivir occidental, materialista y basada en la posesión de objetos supuestamente para saciar nuestro deseos de "pseudofelicidad" va a sufrir en los próximos años un serio revés. Y los que ya estén mentalizados para este cambio, eso que llevan de ventaja. En países del norte de Europa, ya existe un sistema bastante aceptado que consiste en compartir medio de transporte privado (y por extensión, gastos de carburante) a la par que se hace algo de vida social. El indivualismo que impera en nuestra sociedad hace que la gente se aisle en su cubículo metálico y no querer oír hablar de que un extraño comparta su espacio. Llegará el día en que conducir un coche sea un auténtico lujo. Los que no piensan en los que vendrán detrás de nosotros me dan auténtica pena. Hace ya más de un siglo que el "hombre civilizado" es egoísta y que "chupa" todo lo que puede a ultranza del supuesto estado de bienestar. Cómo bien afirmaba nuestro bisabueño Darwin, los que sepan sobrevivir a la crisis serán los reyes de la civilización. Los mediocres o los inadaptados se verán relegados por sus propios vicios.

Circular por carretera también es una cuestión de civismo. Y desgraciadamente, cada vez más a menudo, brilla por su ausencia. Por ello, España seguirá siendo un país de pandereta. Hay que ser pesimista sobre este punto. El hecho de que se haya reducido el número de muertos en carretera desde la entrada en vigor del carnet por puntos no garantiza que pasado el susto inicial de los puntitos que van desapareciendo del carnet, las multas astronómicas, los controles de la G.C. de Tráfico y los radares móviles o fijos, no se vuelvan a las cifras de espanto de años atrás. Todo sistema represivo arroja en los primeros tiempos resultados que pueden llevar a la euforia de los espíritus politico-simplistas. Sin embargo los efectos no duran demasiado. Es como una droga euforizante. Entonces hay que aumentar la dosis. Pero mire usted, el hombre no es un robot y al cabo de un tiempo se satura y bascula hacia comportamientos opuestos. Circular sin carnet de conducir es un buen ejemplo de ello. Lo que no hay en las carreteras españolas no lo busquemos en otros sitios. Basta echar un vistazo a las autopistas alemanas por ejemplo. Allí, no existe la limitación de velocidad, y sin embargo, apenas se registran accidentes mortales. El grado de barbarie automovilística no tiene parangón en este nuestro país. Bueno, si nos vamos a alguna región perdida de África, tal vez encontremos algo que se le parezca. Los españoles suelen ser en general unos capullos al volante.

¿Y si se cogiera al toro por los cuernos de una vez por todas? ¿Y si se reformara REALMENTE la forma de aprender a conducir en este país? ¿Y si se enseñara a los conductores noveles a dominar verdareramente sus vehículos? Empezaría por un conocimiento en profundidad de la mecánica, de los principios físicos que rigen el comportamiento de un objeto en movimiento, de la evaluación y de la capacidad de reacción que debe tener aquél que se pone delante de un volante. ¿No os habéis preguntado nunca que al volante de un cacharro de una tonelada, poder salir indemne a 120km/h. es tan importante como llegar a un destino? Y que poder restablecer la trayectoria de un coche por un volantazo inesperado al querer evitar un obstáculo surgido de pronto puede salvar vidas... Ay! Pero qué estoy diciendo... Si es que los lobbies de las auto-escuelas son tanto o más intocables que los políticos de turno. El que se crea el Alonso de turno, que se vaya a los circuitos. Me repatean los viejos que circulan a 30 por hora, los que creen que se puede conducir con una sola mano y la otras la dejan colgando por fuera, los que no saben dónde se encuentran los intermitentes de sus vehículos. Ah! Y aquellos que se abonan a circular en autovías por el carril de la izquierda como si fuera de su propiedad... Conducir debería estar vedado a quellos que se lo toman a la ligera. Cuando estuve en Irlanda hace tres años, comprobé cómo el acceso a las autovías está prohibido a aquellos conductores con menos de un año de antigüedad de carnet. Y me parece bien. Primero un rodaje por carreteras secundarias, y luego se pasa a palabras mayores. Porque a nadie se le ocurriría ponerse al mando de un avión sin saber pilotar, ni nadie gobernaría un barco sin haberse hecho a la mar antes.

Y los que nos viene... No quiero ser alarmista o pecar de pesismismo, pero la crisis que se nos va a echar encima sólo puede traer consecuencias nefastas. Cualquier niño de pecho sabe que el paro que genera la crisis afecta negativamente a los conductores: angustia, ansiedad, estados depresivos, situación de fracaso personal no pueden conducir, y nunca mejor dicho, más que a conducciones temerarias.

Una última cosa, para aquellos que dirán que el estado del firme tiene también mucha importancia en la seguridad de los conductores. Si el firme está en un estado lamentable, al margen de que uno se pueda quejar o no, se reduce la velocidad y punto. Conducir bien es principalmente saber adaptarse a las circunstancias en vez de culpar incansablemente al estado de nuestros accidentes.

Y con la que está cayendo, todavía sin coche... Paciencia!

domingo, 9 de noviembre de 2008

¡Bienvenidos a Paranoialandia!


Se acaban de poner en marcha en algunos aeropuertos europeos unos arcos de detección de seguridad muy particulares. Según dicen, pertenecen a una nueva generación de controles y ya se han disparado las opiniones sobre su conveniencia o no.

¿De qué se trata? Pues a primera vista es una simple cabina en la cual los pasajeros que van a tomar un avión se introducen. Están llamados a sustituir a los tradicionales arcos que hacen sonar una alarma cuando se tienen en los bolsillos monedas, llaves u otros objetos metálicos, amén de las hebillas de los cinturones. Con este aparato, ya no hay necesidad de quitarse nada, ya que literalmente, es una máquina que "desnuda" al incauto pasajero. O dicho de otra forma, el escáner incorporado revela la anatomía del que se introduce en ella gracias a una novedosa (y traicionera) técnica llamada "de ondas milimétricas". Con este procedimiento, que muestra el cuerpo del pasajero se hace imposible disimular cualquier objeto bajo la ropa. La principal ventaja del escáner corporal reside en su capacidad de detectar todo tipo de líquidos y objetos, y no solamente el metal.

El procedimiento parece simple: el pasajero entra en la cabina, levanta los brazos y vulve a salir de ella. Duración del proceso: 3 segundos. Ya no se formarán largas colas y penosos procesos de cacheo, ni viajeros con sus zapatos en la mano. Sin embargo, y ahí está el quid de la cuestión, no todos son ventajas en el aparatejo de marras. Y es que como decía, el incauto pasajero es "desnudado" literalmente, lo cual permite ver a los controladores los genitales, los pechos e incluso si la fémina que está dentro de la cabina lleva implantes mamarios. Es decir que el que esté al control se va a poner las botas, ya que verá a "tutilimundi" como dios lo trajo al mundo. ¿Y dónde está la ética en todo esto? ¿Algún día veremos en los aeropuertos cabinas... de pelis X?

¿Seguridad o intimidad? Gran dilema éste para las autoridades europeas en materia de aeropuertos. Aunque según dicen, se formarán dos colas, una para hombres y otra para mujeres, y los que controlen serán del mismo sexo. ¡Qué bien se lo van a pasar los gays y lesbianas! Ah! Y las imágenes se borrarán instantáneamente. En el país más puritano del mundo, EEUU, la medida ha sido acogida malamente, con miles de protestas por parte de los viajeros. Pero estas protestas se las pasan los gobiernos por el forrillo izquierdo, en nombre de la seguridad nacional.

Vaya por delante que no viajo en avión desde el verano del 2005, cuando fui a Irlanda, y conozco de cerca las medidas de seguridad que imperaban entonces (lo de los zapatos en la mano antes de embarcar, por ejemplo). Pero es que me da que no voy a volver a pillarme un avión si tengo elección. De hecho, pienso que el transporte aéreo ya huele a muerto desde hace tiempo, más concretamente desde el fatídico 11 de septiembre. Y es que cada nueva incursión en una supuesta seguridad aérea representa una intrusión cada vez más escandalosa del estado y de sus aparatejos en la vida íntima de las personas. A principios de septiembre de 2001, antes del atentado a las Torres Gemelas, volé desde Santa Cruz en Bolivia a Madrid, con escala en Sao Paulo, y ya había controles exhaustivos de seguridad. Ya se controlaba la identidad de los viajeros, las restricciones sobre el contenido del equipaje de mano, la necesidad más frecuente de dar más y más datos cada vez más personales, los pasaportes con datos biométricos, y ahora, el remate del pastel es que nos van a "desnudar" literalmente... A estos niveles, el transporte aéreo hace una labor de laboratorio. Somos unos cobayas, unos conejillos de india puros y duros. Porque aquí se está ya traspasando unas parcelas de la vida que no se deberían tocar. ¿Hasta cuándo los consumidores deberemos pasar por el aro, y nunca mejor dicho, sin rechistar? Porque otra cosa, ¿quién me dice a mí que esas "ondas milimétricas" no son perjudiciales para la salud? Ah! esperad, que me dicen al oído que es por nuestro bien. Entonces, ala, no se puede decir ni mú... Pos nada, a despelotarse y listo!

¿Para cuándo un escáner psicológico? Ya puestos a ir siempre en beneficio de la seguridad en vuelos, sería interesante que viéramos un día controles a través de escáneres psicológicos para detectar los desvaríos mentales de todo tipo, perfiles "pre-criminales", etc. en nombre de la sacrosanta seguridad. Me estaba acordando de aquella película del Spielberg, con Tom Cruise de poli del futuro. Y digo yo que si tan preocupados están en nuestra seguridad, más les hubiera valido que hubieran revisado comodiosmanda el Boeing de Barajas, que ahí se lucieron con todo el equipo los de seguridad de vuelos. De hecho, exite por esos mundos de dios, una lista de las compañías que tienen vetado aterrizar en los aeropuertos europeos.

Pienso que esto de los arcos despeloteadores no puede ser la única solución contra el terrorismo internacional. No se puede seguir haciendo la guerra en estos lugares en nombre de no se sabe bien qué, y protegerse emparanoiando continuamente al ciudadanos de a pie.

Lo próximo, ¿Qué será? ¿Dar nuestra huella genética para poder viajar? ¡Bienvenidos a Paranoialandia!