lunes, 26 de abril de 2010

Y Evo montó el pollo (no, el de Andreíta, no)

Antes de irme de mini-puente, prometí en el feisbuc escribir algo sobre unas parrafadas que salieron de la boca de un presidente de país sudamericano, y aquí estoy, fiel a mi palabra.

Resulta que unas palabras dichas, no en la intimidad y robadas por periodistas avispados, sino en el transcurso de un discurso de la Conferencia sobre el clima que se acaba de celebrar en Cochabamba (Bolivia) han levantado un revuelo de proporciones planetarias, sobre todo en la comunidad de gays y lesbianas, entre otras. Evo Morales declaró sin pestañear que el pollo que se come en Occidente convierte a los hombres en homosexuales por las hormonas que llevan. Y no contento por haber dicho estas perlas de la oratoria, también ha afirmado que los hombres occidentales también sufren las consecuencias de comer alimentos transgénicos en forma de calvicie. Ahí es nada! Pero no contento con eso, también atacó a la cocacola, que según sus palabras "es capaz de destascar inodoros sin esfuerzos". Lo dicho, sin pestañear.

Las gilipolleces es lo que tienen. Pero permite a los descerebrados soltarlas de vez en cuando. Ultimamente nos estamos empachando de gilipolleces de todo tipo. Y ya me estoy cansando, francamente. Para muestra, un botón... o tres. Gilipolleces dichas por parte de obispos lujuriosos que culpan de sus abusos a cualquier otro factor ambiental y son incapaces de asumir sus responsabilidades penales por los delitos cometidos impunemente durante décadas. Más gilipolleces en boca de un fanático imán iraní que también afirma sin que se le mueva un sólo músculo del rostro (que ya es difícil) que las mujeres que no llevan velo han provocado los terremotos, y por extensión la erupción del volcán islandés de nombre impronunciable...

Y es que se puede ser un buen político, hacer discursos inteligentes sin caer en las bajezas de soltareste tipo de estupideces etnicistas y homófobas. Porque da lástima ver que, supuestamente, para salir del pozo de miseria en el que está metido Bolivia (recuerdo que este país es el segundo más pobre del continente americano) un mandatario sume todavía más miseria moral y educativa a sus habitantes. Debería dejar de masticar coca, porque los efectos secundarios le están empanando el cerebro. Espero que mucho de los asistentes a esa cumbre se partieran al menos la caja al escuchar semejantes sandeces.

Me da qué pensar lo de la coca cola (de hecho no bebo habitualmente) por su fórmula hiper-secreta pero más me da qué pensar la imitación burda que en el país andino se ha hecho de ella. El engendro en cuestión se llama coca-colla (colla en referencia a una de las dos etnias mayoritarias de Bolivia), que tampoco es que se hayan esforzado mucho los del marketing por ser originales, que digamos, y sus efectos a largo plazo que bien pueden ser calvicie y cambio en la orientación sexual, por ejemplo. Recordemos que la coca desapareció de la bebida yanki por excelencia hace más de ochenta años...

Pero volviendo a las polémicas declaraciones. Estaba recordando que las provincias del este boliviano pedían desde hace años la independencia/autonomía del resto del país. No me extraña que ahora se quieran disgregar con más ahínco si cabe. Y menos mal que no ha sido un dictador fascista el que ha hecho estas afirmaciones. No me cabe imaginar las repercusiones que habría tenido. Pobres izquierdistas calvos y gays.

Morales se está revelando como un cómico sin parangón en la escena internacional. Vamos, que Berlusconi se está quedando a la altura del betún. Casi, casi está ya a la misma altura del cartel que su "gran amigo" Chávez. A este paso, pronto los podremos ver en el Club de la Comedia, cosechando grandes éxitos. No me extraña que el nivel educativo y mental de los indígenas siga como está desde hace siglos, pero no por el tipo de pollo (transgénico o no) que comen, sino por seguir mascando las hojas de coca y sobre todo, por escuchar de sus dirigentes semejantes paridas. Le recomiendo a Morales que se presente al casting de alguna marca multinacional de champú, que seguro que "él lo vale". Eso o que se haga charlatán de feria. No sé si este tipo come demasiadas hormonas, pero lo que es de sus neuronas, o mejor dicho, la ausencia de éstas, es inversamente proporcional a la cantidad de melena que luce habitualmente.

Último chiste que se me ocurre... Si los del Vaticano nos dicen que los homosexuales son pedófilos y Morales nos cuenta que el pollo hormonado hace que los hombres se vuelvan homosexuales... ergo, los que comen pollo con hormonas son pedófilos calvos! Qué fuerte este tío...

Lo dicho, el mundo, o mejor dicho algunos de sus dirigentes se están volviendo gilipollas. Que dios nos asista!

domingo, 18 de abril de 2010

El día en que un volcán la lió parda






Esta vez no es la nieve, que ya paralizó aeropuertos de medio mundo el pasado invierno. Esta vez es la incontrolable fuerza de la naturaleza, personalizada en volcán en erupción la que ha paralizado sin paliativos el tráfico aéreo de más de media Europa.



Desde que entrara en erupción hace una semana un volcán islandés de nombre impronunciable, no ha parado de escupir una montaña kilométrica de humo y cenizas que han tapado literalmente los cielos del continente. Esto ha obligado a más de un centenar de aeropuertos a cerrar sus instalaciones, y cancelado miles de vuelos con el consiguiente cabreo de los incautos viajeros que se han visto compuestos y sin viaje. Un auténtico caos aéreo. Como si fuera de nuevo el 11 de septiembre, pero por causas naturales y sin torres gemelas...



Y no es que me alegre especialmente de ver todos estos pretenciosos seres humanos con cara de desesperación a causa de un volcán islandés. Pues como le dé por despertarse al que está al lado, me veo volviendo a la Edad Media (no, no la que describía Belén Ignorancia Esteban hace unos días). Sí, me parece muy cómica esta parálisis general de la aviación europea por una nubecita de nada de cenizas volcánicas. Además, qué triste también que muchos de los mandatarios mundiales no hayan podido asistir al funeral polaco. De pronto nos damos cuenta de cuán frágil es nuestra situación con respecto a la naturaleza. Mira que cuando le da por rebelarse, no queda títere con cabeza. Me estoy acordando así a botepronto, y por mencionar aquellos que conmocionaron al mundo, especialmente del Katrina, del tsunami en el sudeste asiático, de Haití, de Chile, de... y me estaría horas enumerando catástrofes naturales que han puesto en jaque a la población mundial. Más si cabo ahora, con esta nube de cenizas invasiva, se puede apreciar la dependencia y la fragilidad del mundo en el que vivimos. Un grano de arena, una nube de polvo y... compañías aéreas que pierden millones de euros, cientos de miles de viajeros que se quedan varados en los aeropuertos, una economía paralizada en parte. Un desastre para algunos.

Cuando inconscientemente (o no tanto) la naturaleza se pone a perturbar la marcha ineluctable del hombre hacia su propio final, me suena como una dulce venganza bien merecida. En cualquier caso, esta vez al menos por un tiempo, es la propia naturaleza la que dicta sus normas, su ley y clava en el suelo el minúsculo ser humano, que se lamenta de su impotencia. Tal vez exista una relación directa entre la contaminación ambiental cada vez más brutal, la deforestación salvaje en muchos países del mal llamado tercer mundo, el consumo salvaje y obsceno.

Tal vez sólo bastaría tener (recuperar) un poco de humildad, de modestia; convendría acaso disminuir el nivel de arrogancia, volver a poner al hombre en su nivel, saber escuchar el planeta, para alcanzar a comprender ciertas cosas. Y es que cuando oigo eso de "hombre civilizado" me da la risa tonta. En realidad, no dista mucho del Cromagnon: bruto, bárbaro y un terrible y cruel depredador...

lunes, 5 de abril de 2010

El principio del fin de algo gordo

Día sí, día también nos vuelven a descubrir los medios de comunicación los abusos cometidos por clérigos de la iglesia católica en numerosos puntos del planeta. Hasta ahora, me había contenido de formular cualquier comentario al respecto, pero consciente de que esto no iba a terminar muy bien, he decidido escribir unas cuantas reflexiones al respecto... Y la gota que ha colmado el vaso de mi tolerancia verbal ha sido que precisamente en estas fiestas de Semana Santa, y cuando el asunto se está saliendo de madre, el Vaticano ha cerrado filas en torno a Ratzinger en los asuntos de pedofilia. Y es que este hombre, simpre ha barrido debajo de la alfombra esos temas que para él son minucias comparadas con el tema del aborto, del sida en África o la ciencia, por poner sólo tres asuntos polémicos con respecto al tratamiento que les dan desde la Santa Sede.

Apartar la vista. Eso es algo que suelen hacer sin el más mínimo cargo de conciencia, si es que estas gentes tiene conciencia (claro, que ellos tienen la confesión y el perdón!). Y es que el papa se ha referido en su alocución habitual de ayer domingo "orbi et urbi" SÓLO a los conflictos que le son totalmente ajenos; es decir a África y Oriente Medio.

Como decía al empezar este post, desde hace varios meses, la iglesia católica se ha visto salpicada por una escalada de escándalos, destapados en Europa (Alemania, Austria, España, Irlanda...). Lo irónico del tema es que desde su imponente balcón, frente a la plaza San Pedro, Ratzinger ha dicho que "frente a una crisis profunda, la humanidad necesita una conversión espiritual y moral", así como "cambios profundos, empezando por los de la conciencia". Pero ha eludido "conscientemente" los escándalos entre sus curas. Sólo ha hecho un llamamiento a la paz, especialmente en Oriente Medio, y en países africanos. Y todo esto sin despeinarse su tupé "inmaculado".

Sin duda alguna, ésta ha sido una Pascua especialmente complicada para los moradores del Vaticano. Un auténtico "via crucis", diría. La guinda del pastel de la polémica la ha puesto hace unos pocos días un predicador vaticano al hacer un símil entre las acusaciones de pedofilia y los ataques directos al papa y el antisemitismo. Rápidamente, el Vaticano se ha desligado de esas polémicas afirmaciones, afirmando que se trataba sólo de opiniones personales. Ahí queda eso. Si es que son campeones en caos organizado, estos tíos de faldas con inclinaciones efébicas...

Y aquí empiezan mis reflexiones...

Tierra llamando a la cordura, tierra llamando a la sensatez!!! Que nos llegue pronto una nueva era con sus cambios! Los abusos de poder (la pedofilia lo es muy claramente) tienen los días contados. Las bases sobre las que se asientan los sacrosantos fundamentos de la iglesia católica con su papa a la cabeza están en franco declive. El anacronismo se hará más y más evidente ya que es de dominio público que llevar una vida sexual y afectiva sana, hace que la testosterona esté calmada. Los poderes fundados en el miedo y la manipulación mental han llegado a donde tenían que llegar. El ser humano (y por extensión, los que han hecho voto de castidad; rota muchas veces) necesita aceptarse y no mortificarse. La gran limpieza de primavera del planeta ha comenzado. Esto ya no tiene vuelta de hoja. El tiempo de los malabarismos mentales ha terminado. Viva la vida, que dirían los Coldplay...

Y es que la iglesia católica no se sirve de estos problemas para hacer examen de conciencia (la conciencia, de nuevo!), reflexionar y plantear nuevos caminos, sino para (de la misma forma que lo haría un niño inmaduro) ahogar y diluir sus propios errores. Pero lo más grave no es que se cometan estos delitos (que de por sí ya es muy grave) sino que los curas pedófilos hayan sido encubiertos, trasladados, protegidos por una jerarquía que niega sistemáticamente el delito y mira hacia otro lado con el fin de que el escándalo no desluzca la imagen de la sacrosanta iglesia... Y esto no puede más que conseguir el efecto contrario del deseado. El hecho de hacerse públicos estos escándalos de pedofilia conseguirá finalmente acabar con la ya de por sí escasa credibilidad de la institución. Pero el colmo del cinismo más salvaje es cuando se lamentan, se dicen perseguidos y se declaran ellos mismos "víctimas". La hipocresía se paga siempre y a veces muy cara. Y esto es de una indecencia intolerable.

Y es que esto no puede, no debe, terminar muy bien. Vaticino a la iglesia católica, tal y como la conocemos hoy, un futuro próximo no muy halagüeño. Y si no, al tiempo...

sábado, 13 de febrero de 2010

Lo hacemos aposta y no nos sale tan bien!



Ayer, después de mucho tiempo sin poder ir de senderismo, partí hacia los Mallos de Riglos (que ya visité hace un par de años) con un grupo de gentes para hacer una ruta que rodea los Mallos. Frío que pelaba... no subieron los termómetros más allá de los menos siete grados. Pero lucía el sol, así que con la claridad que tienen los días invernales, nos pusimos en marcha para realizar un recorrido de cinco horas por senderos escarpados y una orografía tan accidentada que finalmente y tras casi tres horas de caminata, obligaron a mis rodillas a aceptar lo evidente: si a partir de ese punto quedaba lo más difícil de la travesía, lo más juicioso era batirse en retirada. Ya se sabe el dicho: hay que saber retirarse a tiempo. Así que al llegar al pantano de la Peña, Gema y yo nos fuimos en dirección contraria al resto del grupo.
Cruzamos el pantano, y tal y como nos aconsejó uno de los compañeros de senda, nos dirigimos a un restaurante que se encuentra a pie de carretera, hacia el norte, llamado "El Jabalí". Ellos irían a buscarnos allí, cuando terminaran el recorrido. Eso nos permitiría poder relajarnos tomando algo caliente para paliar los efectos del frío. Pero nuestra sorpresa fue mayúscula cuando al llegar al lugar, tras quince minutos de caminata, nos encontramos el restaurante cerrado a cal y canto. Así que nos sentamos en las escaleras de acceso, al solecito tibio de invierno, a tomarnos un bocata de los que habíamos traido en las mochilas. No había mucho tráfico a esas horas, apenas unas cuantas furgonetas de reparto, de las que suelen dejar mercancías en los bares y restaurantes, ya que empezaba el fin de semana. La verdad es que la idea de esperar tres horas a que vinieran a buscarnos no me hacía mucha gracia, así que propuse a Gema hacer auto-stop hasta Ayerbe, adonde teníamos previsto almorzar todos antes de regresar hacia nuestros puntos de origen.
Dicho y hecho, bueno, a pesar de las reservas de Gema. He de decir que en mi caso, ya lo había hecho muchas veces, sobre todo de jovencita, así que era un poco volver a tener veintipocos y dejar que la aventura (o el destino) nos pusiese delante algún alma caritativa que nos acercara al pueblo, distante de una decena de kilómetros.
Nos ponemos en pie, nos acercamos a la orilla de la carretera y alzo el brazo derecho, con el pulgar de la mano hacia arriba. Oimos que se acerca un vehículo. En realidad, lo oímos pero no lo vemos hasta que ya está practicamente a veinte menos de nosotros, ya que el restaurante se encuentra justo en una de las numerosas curvas de la carretera. Y no hacía ni dos segundos que tenía el brazo en alto, que al ver el coche que se acerca, lo bajo inmediatamente, casi, casi arrepintiéndome de lo que estaba haciendo. Porque el primer coche que apareció por la curva era un cuatro por cuatro de la guardia civil... Pensé en aquel momento: "Tierra trágame". Me quedé sin poder reaccionar, y aunque imaginé que el gesto iba a quedar sin consecuencias y que los agentes de la Benemérita seguirían su camino sin más, me equivoqué cuando vimos que el vehículo se paró en el espacio delantero del restaurante, habilitado precisamente para los clientes. Ahí ya me entró algo de pánico, y Gema y yo nos miramos de hito en hito, sin saber qué decir. Todo esto en décimas de segundo: poner el dedo arriba, aparecer el coche, bajar el dedo, entrarme ganas de que me tragara la tierra y pararse los agentes.
Pararon efectivamente el vehículo, y bajaron la ventanilla. Nos saludaron, nos identificamos, les explicamos la situación y nos quedamos ojipláticas cuando nos dijeron que no había problema, que nos llevarían ellos a Ayerbe.
Eran dos agentes jóvenes, de las nuevas generaciones que poco o nada tienen que ver con las imágenes que todo el mundo guarda en la retina, de tíos bigotudos, con gesto de mala leche, o simplemente catetos primitivos con uniforme y tricornio acharolado, de los que en tantas ocasiones protagonizaron chistes. Incluso me ayudaron a subir al vehículo. Nos explicaron que aunque no tienen permiso para hacer lo que estaban a punto de hacer, y ya que les pillaba de camino, pues que no les importaba. Yo estaba alucinando en cuadros escoceses y miraba a Gema sin entender una papa de lo que estaba ocurriendo. Simplemente aquellos parecía estar ocurriendo en una especie de pesadilla surrealista. Pasados unos segundos de titubeo, me dije que finalmente aquello no era tan malo, y que puestos a que nos llevara alguien, más nos valía que fuera alguien de confianza, y con las máximas garantías de seguridad, jejeje...
Los doce kilómetros que nos separaban de Ayerbe transcurrieron entre conversaciones amenas, dado que enseguida contamos quiénes éramos y de donde veníamos. Hasta se permitieron hacer unas bromas sobre la proximidad de la zona de la franja, diciendo que si éramos catalanas, que paraban el coche y nos dejaban en tierra. Hablamos de educación, básicamente. Es curioso, porque un detalle que me hizo sonreir al tiempo que volvían a mi mente la imagen que he descrito anteriormente sobre los tradicionales guardias civiles, es que el agente que nos hablaba en todo momento, y que iba sentado en el asiento del copiloto, llevaba en la boca un palillo que sujetaba en la mano cuando nos hablaba y que se volvía a colocar en la comisura de los labios cuando terminaba su alocución. Bueno, eso y el darme cuenta de que no se había abrochado el cinturón en ningún momento. Viva el ejemplo de los miembros de la autoridad! Finalizado el trayecto, nos dejaron en la plaza principal de Ayerbe, y continuaron su camino.
Cuando finalmente, los miembros del grupo senderista se reunieron con nosotros en el restaurante La Floresta de Ayerbe, y les contamos nuestra pequeña aventura, todos se esclafaron de risa. Vaya, vaya con la Benemérita!

domingo, 31 de enero de 2010

¿Hay alguien ahí?


Leo, entre sorprendida y descojonada, que se ha abierto un debate en torno a la peregrina idea de seguir enviando mensajes al espacio exterior para ver si hay respuesta de vida alienígena... Ya habían, en algunas ocasiones anteriores, enviado mensajes al espacio, como por ejemplo una canción de los Beatles por si "alguien" podía apreciar las melodías de los de Liverpool. También me acuerdo de aquella película llamada "Contact" que lidiaba el mismo tema. Y no solamente está de nuevo el tema candente, sino que se ha celebrado recientemente una conferencia internacional de expertos en Londres.
Pero, me pregunto si es prudente avisar de nuestra presencia en nuestro ya de por sí maltrecho planeta para que encima nos caigan "vecinos interestelares" hostiles. Porque además, los mensajes no son tan inocuos como la canción de MacCartney. Los hay que son mensajes de amor, fotos de políticos y gente famosilla, publicitarios y otras lindezas. A saber si alguno se va a sentir molesto o incluso amenazado. Encima, como el servicio postal interestelar funciona peor que el nuestro, estos mensajes no alcanzarán lugares del espacio supuestamente habitados hasta el 2439. Toma ya. Para aquel entonces, no solamente MacCartney, sino todos los que supuestamente puedan leer esto y la que viste y calza, estaremos criando malvas. Y es que desde el año 77 del pasado siglo, se están escudriñando los cielos para ver si se reciben señales de otros mundo. Los responsables del proyecto ya se han cansado de escuchar nada y, desesperados, se han dedicado estos últimos años a enviar los mensajitos de marras.
Y es que cuando no se sabe absolutamente nada de lo que hay por esos mundos interestelares, más le vale a uno andarse con cuidado. No vaya a ser que ocurra lo que en la película "Mars attack"...
Pero vamos a ver, señores... Desde los albores de la humanidad (la nuestra), hemos hecho guerras, sometido a torturas, masacrado a nuestros semejantes; aunque paradójicamente y de forma paralela, hemos socorrido al necesitado, enviado voluntarios a desastres naturales (leáse, ultimamente Haití). Cuando la mayoría de la población de este planeta no tiene qué llevarse a la boca mientras unos pocos se preocupan del montante de su pensión multimillonaria... algunos pasan su tiempo en futilidades propias de adolescentes con acné para dilucidar si mandando unos cuantos mensajitos inocentes al espacio, y nos vendrá de vuelta un tropel de marcianitos en son de paz para solucionarnos los problemas... "Hé, oigan, que estamos aquí... yujuuuuu, aquí, el tercer planeta a la derecha del sol! No tiene pérdida".
Lo que tiene bemoles es que desde hace décadas, se han avistado docenas de ovnis en forma de platillo volante, de bola de luz, o con formas extrañas, y que se desplazan a más de 5000 kilómetros a la hora. Eso sí, siempre en medio del campo o en mitad del bosque. Pero nunca en la plaza de la Cibeles o a los pies de la Torre Eiffel. ¡Qué casualidad, hombre!
Conclusión:
- O los ovnis recorren millones de kilómetros únicamente para admirar los árboles, las vacas que pacen o los peces, y abducir a inocentes granjeros con los cuales hacen experimentos escalofriantes, siempre de naturaleza sexual...
- O bien son seres asociales, a los que no les gusta las grandes multitudes...
- O les asusta pillar la gripe A...
- O bien han visto todas las pelis de marcianos que se han hecho hasta ahora, y están convencidos de que al final llega una panda de americones, y que a todos los que han venido del espacio exterior los fulminan en menos que canta un gallo o los mandan de vuelta a su galaxia con una buena patada de bota tejana en el culo...
- O bien... nada, porque ya empezamos algunas a estar hasta el moño de tantas tonterías como el triángulo de las Bermudas, el monstruo del Lago Ness y demás...
Señores de la política internacional, ya basta de gilipolleces... Dedíquense a arreglar los problemas de ESTE planeta y déjense de gaitas interestelares. Punto.

sábado, 30 de enero de 2010

Sarrancolin

Sarrancolin es una pequeña población que debe su fama a las canteras de mármol que sirvieron para decorar profusa y lujosamente muchos de los rincones del famoso Palacio de Versailles. Y también lo visitaremos.

miércoles, 27 de enero de 2010

Mauvezin


El próximo día 28 de febrero, salimos (un grupo de 22 alumnos de 3º y 4º de ESO, y mi compañera Concha) de viaje de intercambio para Tarbes.
Nuestro programa de actividades incluyen muchas visitas interesantes; entre otras, el castillo de Mauvezin, del que he puesto foto a la izquierda de estas líneas. Pero también iremos a Pau, a visitar su insigne castillo, visitaremos Tarbes, Arreau, Sarrancolin, el Pic del Midi y muchas otras más cosas. Ya iré poniendo post con fotos de esos sitios.
Continuará...