domingo, 28 de diciembre de 2008

Domingo de monasterios y cuevas

El Monasterio de Poblet es, de los tres principales de los que consta la Ruta del Císter, el más grande, el más impresionante, arquitectónicamente hablando y el mejor conservado. No es por nada que la Unesco lo designó hace unos años como uno de sus edificios patrimoniales protegidos. En la actualidad, alberga una treintena de monjes benedictinos (orden fundada en el siglo V por San Benito, el artífice de "ora et labora"). En sus amplias dependencias, podemos admirar por ejemplo, una sala capitular que aún hoy es utilizada (el monasterio se empezó a construir en el siglo XI y tardó en completarse la friolera de cinco siglos, por lo que como ejemplo de la diferencia de estilos arquitectónicos podemos ver cómo cado uno de los laterales de su claustro presenta detalles románicos y góticos alternativamente), una basílica que alberga las tumbas de los principales reyes de Aragón, y en rey superstar, los restos de Jaime I el Conquistador, una biblioteca que atesora unos 80.000 volúmenes, unas cocinas pantagruélicas, unos dormitorios que hasta hace poco años todavía ocupaban los monjes ( en la actualidad, ocupan unas celdas con calefacción, signo de los tiempos modernos, comodidad obliga...) Aunque las explicaciones de la visita guiada eran en catalán (si las quería en castellano, tenía que esperar una media hora más) eran facilmente comprensibles; además, me hace hacer un excelente ejercicio mental de traducción y comprensión. Es curioso cómo al hablar francés, se me hace increíblemente fácil entender esta lengua.
Al regreso de Poblet, he parado en L'Espluga de Francolí, a visitar su famosa cueva, de la época neolítica, de cuando los Neandertales poblaban la zona, y antes de que les tomaran el relevo los Homo Sapiens. Las dos cuevas, porque son dos, son impresionantes. No hay pinturas pero ni falta que hace. Además en el silencio que propiciaba lo reducido del grupo en el que me he integrado, hacía que la inmensidad de las entrañas de la tierra resultara más impresionantes si cabe. Son las séptimas en longitud del mundo (las cuartas de Europa). Con animaciones de vídeo, recreaciones de escenas de la vida de la época, da escalofríos pensar en lo dura de aquella vida, en el día a día, en las dificultades de supervivencia, en los peligros que a cada rincón acechaban, en las fieras que comprometían perpetuar la especie, en la dureza de la vida itinerante de aquellos pequeños núcleos de personas luchando por salir adelante sin comodidades, sin facilidades, sólos con su valor y su fuerza personal...
Como finalmente he tenido que volver a siglo XXI al finalizar la visita, y dada la hora que ya se había hecho, he decidido que iba a comer en algún restaurante de Montblanc. Finalmente, y siguiendo los buenos consejos de mi consejera personal de los apartamentos, he ido a comer a Cal Colom, un restaurante de esos en los que no se ven apenas turistas, escondido en un callejón ínfimo, no muy lejos del apartamento. Con resultado no sólo de aprobado, sino de un notable alto por lo sabroso de sus platos y lo exquisito del entorno y del servicio. Además, he tenido suerte, ya que de haber esperado un día más no habría podido degustar su cocina, al cerrar precisamente mañana para tomarse un descanso por vacaciones.
Mañana, creo que visitaré Tarragona.

sábado, 27 de diciembre de 2008

Desde la Conca del Barberà

Escribo desde un ciber que milagrosamente he encontrado. Sí, ya sé que alguno me dirá qué qué hago desde un ciber si me llevé el portátil porque me aseguraron que en el apartamento había wi-fi. Pues al parecer, el wi-fi y el portátil no son muy compatibles porque no hay manera de que se pongan de acuerdo para trabajar juntos. Así que... mi gozo en un pozo...
Como iba diciendo, me encuentro en la Conca del Barberá, más concretamente en la capital de su comarca: Montblanc. Nada que ver con los Alpes ni con la sede de las estilográficas de alto standing pijero. Este Montblanc es un pueblo medieval con sus murallas de gruesas piedras, sus callejuelas empredadas, sus edificios rotundos y longevos, sus pequeñas tiendas tradicionales, sus gentes amables y una paz que precisamente andaba buscando y que creo que me va a venir como anillo al dedo en estos momentos.
Llegué el jueves por la tarde, día de Navidad, tras un trayecto que hasta se me hizo corto: algo más de cuatro horas y media de trayecto por autopista. Y eso que paré un par de veces para los menesteres de rigor. El día estaba bastante soleado y no había demasiado tráfico en ninguno de los dos sentidos. Precisamente por eso fue que elegí ese día para viajar. Teniendo en cuenta que las previsiones anunciaban mal tiempo para los días siguientes y sin ninguna premura de tiempo ni (casi) limitación de estancia, me disponía a disfrutar de estos parajes, en principio, desconocidos para mí.
Es mi primer viaje a Tarragona. Nunca antes había sentido curiosidad por visitar estas tierras y por diferentes motivos, estas navidades le ha tocado. Para aquellos que me conocen, y saben de mis ansias viajeras, no se habrán de extrañar en esta elección. Me gustan las tierras norteñas, eso no es ningún secreto. Creo que hay un "algo" que me empuja a ir hacia el norte, porque mi intuición me dice que esas latitudes son beneficiosas para mi equilibrio y bienestar. Y algo de cierto hay cuando en mis últimos tres o cuatro viajes (Asturias, Navarra, La Rioja, Huesca) lo he elegido para descubrir regiones, territorios y ciudades interesantes. También es cierto, que durante mis años de vivir en el sur, quedé un poco saturada de un cierto tipo de entornos. Ahora creo que necesito más ver montañas, paisajes verdes, valles y picos, carreteras serpenteantes, construcciones diferentes, piedras distintas. En definitiva, cambio completo de decorado.
Tiene su cierta lógica si tenemos en cuenta también que paralelamente, también están ocurriendo cambios sustanciales en mi vida. Ya se sabe lo que dice la sabiduría popular: "los cambios nunca vienen solos". Pues nada, que todo cambio siempre sea para mejor...
He recorrido un par de veces el pueblo. Me ha gustado tanto lo que he visto que he hecho ya un montón de fotos. Como me traje el pen-drive, espero poder copiar alguna foto para colgarla aquí
pronto. De momento el finde se anuncia tranquilo. No tengo planes de momento, así que mientras esté el tiempo lluvioso, no me moveré mucho. Total, tampoco hay prisa ni los monasterios cercanos de la Ruta del Císter se van a mover de sus emplazamientos.
Paz y salud a todos!
...continuará... (bueno, eso espero)

lunes, 22 de diciembre de 2008

Gran robo de pelucos



Jeje... No hace ni dos semanas que los de Harry Winston, en una de las zonas más glamourosas de París se llevaron el chasco del año al ser víctimas de uno de los mayores robos del mundo en su joyería (85 millones de euros!). Y no podía acabar el año sin que, de nuevo, salte a la palestra otro de semejantes características. Y es que en una de las relojerías de más lujo y pijerío de la capital franchute, se acaba de perpetrar uno de los robos de pelucos de más valor del mundo mundial. Nada menos que medio millón de euros en relojes. Pero nada que ver con los casio de plástico de toda la vida, no, qué va... Relojes de lujo de los de cada uno a más de un año de sueldo de mi vida. Al parecer dos tipos armados se personaron en una joyería que hay en la Rue de Rivoli, en la avenida que bordea el Louvre, y tras amenazar al personal de la misma, le obligaron a abrir la caja fuerte, amén de lo que había en las vitrinas, que en estas fechas pre-navideñas estaba a rebosar de modelitos caros. Según los testigos, iban vestidos con gabardinas largas tipo Neo de Matrix. Este último detalle me ha dejado grogui. Eso sí, ladrones, pero tope "fashion" . Por cierto, que me resulta cuanto menos llamativo el hecho de que las cifras que ultimamente se están barajando para cualquier cosa se haga por millones (de lo que sea, que poco importa): pérdidas de tal o cual sector económico, ayudas a los bancos por parte del gobierno de turno, robos o timos varios, pérdidas de empleo... Es como si esto hubiera sucedido siempre, como si nos hubiéramos acostumbrado de una forma natural a estas cantidades astronómicas, y sin embargo a mí personalmente, me siguen pareciendo escandalosos... Y claro, con tantas cifras astronómicas, lo de setenta y tantas mujeres muertas a manos de sus parejas o ex nos resulta banal, casi, casi sin importancia. Qué gran paradoja... Ya lo decía Einstein cuando afirmaba que había dos cosas infinitas en la vida: el universo y la estupidez humana, y de lo primero no estaba muy seguro.


Digo yo que con lo de los móviles, ¿quién lleva todavía reloj a estas alturas? Bueno, yo, que en el insti no llevo el móvil por razones obvias y sí el reloj para saber cuánto me queda para aguantar a los petardos de segundo de la ESO... Si hasta los alumnos llevan uno en la mochila (o en el bolsillo) y cuando les pillas con la mano en la tecla, se disculpan diciendo "es que estaba mirando la hora". Definitivamente, ya nadie lleva peluco. Ni siquiera los maquinistas de Renfe (esto va por ti, Jota!). Y es que volviendo al tema de los móviles, ahora llevan (casi) de todo: GPS, calculadora, videojuegos, tele, MP3. Anda que MacGiver se preocuparía por inventar más trucos para hacer una bomba de un chicle y un elástico... Debo tener de los poquitos modelos de móviles que no sirve más que para llamar, para que me llamen, para enviar mensajes y para recibirlos... y pare usté de contar. Y es que ahora que me quiero cambiar de móvil, tengo un pedazo de dilema que no me deja dormir: sigo con un modelo que ni siquiera lleva cámara de fotos? o bien me compro uno de esos que llevan hasta alarma antiincendios?

Desdramatizando la anécdota, y en cualquier caso, los ladrones ya no tendrán excusa para llegar tarde a la cena de Nochebuena con sus mamás y/o novias respectivas... y los fabricantes, pues eso, que no les tengo mucha lástima. Ah! y yo seguiré de momento pensando qué tipo de móvil me voy a comprar. Y por supuesto, seguiré mirando la hora en mi reloj. Qué se le va a hacer!

domingo, 21 de diciembre de 2008

2009, el gran agujero negro



2008 está a punto de terminar y nos ha dejado múltiples acontecimientos que han marcado la actualidad y han dejado casi sin aliento este ya de por sí convulso planeta. Es hora de hacer balances, personales, económicos, sociales y emocionales. No es que sea yo muy partidaria de hacerlos, muy al contrario, soy de los que consideran que el tiempo es una división arbitraria y un continuum sin principio y sin fin. Así que le daré la vuelta al argumento de ver qué ha sido el año 2008 para ver qué se adivina y qué nos deparará el que está a punto de entrar, el oscuro y temido 2009.

Lo que un sociólogo francés ha comentado sobre lo que nos espera a la vuelta de la esquina es que 2009 será literalmente "un gran agujero negro". Dicho así, se nos pueden quitar ipso facto las ganas de llevar a cabo cualquier tipo de celebración, y hasta es posible que se nos atraganten las uvas de la nochevieja. Si la expresión "annus horribilis" se nos quedó tatuada en la memoria de boca de la Reina de Inglaterra cuando, tras el sonado divorcio de su hijo Carlos de Diana, se le quemó parte del palacio de Windsor, bien podríamos tomarlo prestado para aplicarlo a este año próximo. Y es que el asunto Madoff, ha representado un jarro de agua fría más en la cabeza de los contribuyentes. Pues si bien ha timado descaradamente a las grandes fortunas, el ciudadano de a pie, que ya está perdiendo la paciencia y sobre todo la confianza en los bancos, se dicen que ya no les queda más que perder el empleo, y con la que está cayendo, y las previsiones agoreras que apuntan para el próximo ejercicio no hacen más que confirmar lo de "agujero" y lo de "negro". Y ningún sector social se va a ver salvado. Cuanto más abajo en la escala, menos dificultades, ya que hace tiempo que los que no tenemos mucho nos hemos acostumbrado a vivir con poco. El discurso que nos sirven los medios de comunicación día sí, día también, ya se ha generalizado. Para muchos, lo del balance negativo lleva décadas de aplicación. Y el ambiente pesismista no ayuda precisamente mucho. Por eso, más de uno se refugiará estas fiestas en la familia, aunque el resto del año se tiren los trastos a la cabeza.

Mi teoría es que una nueva era se ha puesto en marcha. Lo de Atenas no es más que la gota que ha hecho desbordar el vaso. Las protestas se han ido extendiendo a velocidad de mecha de dinamitay la gente ya no se queda impasible, esperando que alguien le solucione los problemas. Sale a la calle a expresar aquello que se ha callado durante años. Creo que alguien se hartó de que los gobernantes mantengan (no se sabe cómo) una retórica puramente ideológica. Es tiempo de cambios, de modificaciones, de rectificaciones, de elecciones personales diferentes. Porque si nos paramos a pensar, hablar de dos mil nueve como agujero negro es al fin y al cabo un afeumismo. Deberíamos mejor hablar de socavón. Tampoco hace falta ser muy listo para saber que hay revuelta (y por qué no, revolución!) en el aire. Cuando la inmensa mayoría de la gente se ha visto afectada, de una manera u otra, más le valdrían a los gobernantes que vigilaran sus acciones, decisiones, promesas y consecuencias. Entramos en tiempos de reformas, que en su sentido estricto significa "cambiar para mejorar", no lo olvidemos. Y es que los tiempos que se avecinan nos la demandan a gritos. Reformas, ya! Cambios, enseguida! Y vaya si los habrá. No hace falta tener la bola de cristal a mano para preverlas. Despidos a porrillo, EREs a puntapala, listas del paro interminables. Pero no son cambios al estilo Lampedusa; no nos engañemos. Los cambios tienen que ser reales, auténticos. Los cambios sociales están a la vuelta de la esquina, señores políticos, legisladores, potentados... y vosotros, bailando sobre el volcán... Pero no nos engañemos: es necesario que la palabra reforma sea sinónimo de progreso,no de regresión generalizada. Porque de ninguna manera se podría seguir avanzando con coherencia ni resultados tangibles para construir un estado de bienestar. En estos momentos, lo que impera por parte de los políticos es cinismo, ausencia de diálogo y mentira. Lo cual ha dejado de impresionar de cara a la credibilidad. Esta crisis va a ser la más importante desde la segunda guerra mundial, lo queramos o no. Y el mundo va a cambiar, lo queramos o no. Va a suponer una ruptura con nuestra forma de ver el mundo, la realidad y nuestro día a día. Y es también una ruptura histórica con nuestro modo de ver la vida y la civiliacion. Cuando miramos a nuestro alrededor, sin pensar siquiera en los sondeos de opinión pública, asistimos atónitos al desmoronamiento de la banca, del sistema capitalista en el que estaba basado (nos preguntamos: "Esto qué es?") y nos estamos preguntando qué será lo próximo... La incertidumbre total se apodera de nosotros. Nadie se atreve a dar un paso en falso, nadie quiere mover ficha por temor a terminar de fastidiarlo... En nuestro vecino del norte, se van sucediendo los movimientos estudiantiles en secundaria desde hace ya un par de meses, y es sólo la punta del iceberg. La crisis medioambiental ya se va manifestando poco a poco y cada vez con más contundencia en diferentes puntos del planeta, a cada vez que se reunen los más poderosos.

Déficit presupuestarios, guerras en las bolsas mundiales, calentamiento climático, crisis de la energía, sobrepoblación mundial, OGM, Palestina, Iraq, Afganistán, paro, deuda externa, quiebras, ladrones de guante blanco financieros, mafia, polémica de las cruces en los centros escolares, privatización de los servicios públicos, inflación, deflación, competencia salvaje, fondos de pensiones, contaminación, sequía, pandemias, pesca intensiva, miseria, hambruna, piratería...

Hagan juegos señores, todavía quedan papeletas para el sorteo!

sábado, 20 de diciembre de 2008

La pirámide que se vino abajo

El tema ya estaba durando demasiado. El tipo este, el Madoff, que tiene nombre de vodka ruso baratejo, tenía que haberse caído con todo el equipo hace ya mucho. Después del mayor descalabro financiero del mundo mundial, el planeta empeza a hacer balances de las pérdidas. El jueves pasado, fue detenido, con todas las de la ley. Hasta el día de antes, era un famosísimo gestor de fondos y antiguo presidente del consejo de administración del Nasdaq, una de las dos bolsas de Nueva York, lo cual equivaldría a ser semi-dios en el ámbito del dinero. Ha sido acusado de haber ideado, montado y gestionado un inmenso fraude piramidal.

Muchos de los clientes, que ahora son sus víctimas, de este hombre, calificado como uno de los más ricos y poderosos del mundo, han sido estafados, algunos incluso durante años. De Tokio a Londres, pasando por los EEUU, estos clientes, entre otros entidades bancarias de entre las más poderosas y solventes, fondos de inversión y muchas fortunas personales, están haciendo las cuentas de todo lo que han perdido sobre los fondos que confiadamente entregaron a Madoff. En Francia, precisamente una de las entidades más perjudicadas han sido BNP, cuyo presidente ha sido nombrado paradójicamente hace un par de semanas, "mejor banquero de Europa"... Qué ironías nos depara el destino ¿no te parece, estimado lector? Porque si este es el mejor, ¿cuál debe ser el peor? Por aquí, por Ejpañistán, han sido damnificados varios bancos, entre ellos el omnipotente Santander (la nada despreciable cifra de 3 millones de dólares). Se me atrantaga la voz cuando intento imaginarme el montonazo de pasta que ha timado a muchos incautos. Sin ir más lejos, los intocables suizos también se podrían contar entre los estafados. Por cierto, que ha sido puesto en libertad, previo pago de una fianza de 10 millones de (glups!) dólares. Esto último me ha dejado a cuadros escoceses. ¿Los habrá pagado de esos milloncejos de nada que tenía en su oficina londinense? Por cierto, que el pastel se ha descubierto (no podría ser de otro modo) cuando sus clientes han querido retirar el capital que habían entregado a Madoff y se han percatado de que la caja fuerte de este buen señor estaba vacía... Por cierto, que me pregunto qué ha hecho mal con respecto a los otros, porque con la experiencia de este tipo, la consideración de que gozaba en el seno de la sociedad financiera norteamericana y su fama de honesto (sic) no le han podido mantener a resguardo del escándalo. Si es que tarde o temprano, se le acaba por ver el culo a más de uno. Ya decía yo que hay una justicia divina que obra precisamente cuando tiene que hacerlo. Ya basta de tener que pagar siempre los justos por los pecadores. Llegan nuevos tiempos para la lírica, que decían Golpes Bajos. Los tiempos están cambiado muy rápidamente y los que se han estado riendo a mandíbula batiente de los pobres curritos de a pie ahora tienen que tragar bilis a tazas llenas. Pues mira, pues m'alegro!

Volviendo a un detalle sin (casi) importancia, me parece (y esto es algo muy subjetivo) que 10 millones de fianza para un desfalco de 50 mil millones de dólares es una minucia. Tendrían que haberle enchironado sin posibilidad de fianza alguna. Seamos por un instante algo sensatos: alguien todavía está convencido de que el capitalismo como tal puede sostenerse mucho más todavía conforme está estructurado? ¿Hasta cuándo se van a seguir privatizando los beneficios y socializar las pérdidas? Se hace necesario encontrar un nuevo modelo menos perverso, más centrado y mentalizarse por fin que el mercado no es capaz de autoregularse. Lo que se merecerían muchos bancos son precisamente que los clientes fueran uno tras otro retirando sus fondos, y que entre otras iniciativas que el sueldo de uno ya no tuviera que ingresarse obligatoriamente en una cuenta bancaria. Eso sí sería una gran revolución, sin duda alguna, y además no se le estaría dando de comer a los individuos más perjudiciales: los banqueros. Porque anda que no tardan en llamarte la atención cuando te quedas con el saldo en rojo siquiera veinte euros...

Si este buen señor se hubiera jubilado hace ya diez años, con 60, no habríamos llegado a este descalabro financiero. Sus cuentas habrían sido auditoriadas y el engaño descubierto, pero en 1998! Es realmente vergonzoso permitir a presidentes de bancos, que al fin y al cabo no son más que especuladores, financieros, senadores, etc. trabajar hasta los setenta y encima percibiendo rentas escandalosas hasta el final de sus días laborales. Pobres asalariados que no solamente llegan a la jubilación con una pensión mediocre, sino que físicamente están agotados... Habría que volver a un sistema económico casi olvidado: el del valor del trabajo. El capital es el que sostiene el valor del trabajo. El trabajo es lo que le da valor al capital Pero cuando los banqueros se toman por amos del mundo y quieren valorizar su participación, pues esto es lo que recogemos: un descalabro a nivel mundial. En cualquier caso, yo nunca seré rica, eso está claro, pero si sigo como hasta ahora, creo que nunca perderé mi sentido común y mi conciencia del prójimo. Esta gentuza se corrompe totalmente con tantas cifras astronómicas de pasta gansa. ¿Y por qué lo hacen? ¿Para satisfacer qué? Pues no tengo ni idea, pero imagino que es para calmar un cierto deseo de poder, una cierta satisfacción de ego desaforado. Vete tú a saber... Lo que no han calculado es que sus actos tienen una repercusión social (además de mediática) en la vida del proletariado, incluso tienen efectos mortales. Me dan asco como seres humanos.

El año 2008 está a punto de despedirse y vamos a guardar en nuestra retinas imágenes de tornados, tsunamis, lluvias torrenciales y torrentes de miles de millones de dólares, de euros... Un año excepcional que permitirá a la tierra de hombres construir el mayor desierto del mundo. Y todo gracias al planeta financiero. Gracias por su generosa contribución. En 2009, el Nobel de la Vergüenza deberían dárselo a estos generosos banqueros y financieros por sus esfuerzos, mundialmente reconocidos, de odio a la especie humana.

Me gustaría saber cuánto tiempo transcurrirá hasta que pillen a los jóvenes tiburones que salieron de la academia privada del Madoff... Cuestión de tiempo que entren también a formar parte de la población carcelaria... Y es que hay muchos ricos que son, además de ricos, gilipollas. Porque el sistema de engaño piramidal tiene más años que la "maricastaña". Con esa pasta, ya podrían haber inventado un sistema nuevo, y sobre todo eficaz... Y a los gobiernos, señores, dejen de regalar pasta gansa a los bancos; de todas maneras no solamente nunca la devolverán, sino que la meterán en un pozo sin fondo. Ayuden mejor a los pobres asalariados, que nunca estuvieron más desprotegidos y amenazados con perder el empleo.

jueves, 18 de diciembre de 2008

Lanzamiento olímpico de zapato(s)



Ya llevaba varios días con la idea en mente, pero mis "marditas" y maratonianas sesiones de evaluación lo han retrasado un poco. Las imágenes del otro día en televisión me provocaron una sonora carcajada. Y es que el asunto todavía colea... tanto, que hasta los más avispados ya han sacado un juego ridiculizando (una vez) más a Bush. ¡Qué fuerrrrrrte!

Resulta que Bush, el inconfundible, fue el domingo, sorpresivamente, como suele ser su costumbre, de visita en territorio comanche, perdón, quería decir, territorio enemigo. Pues como iba diciendo, que de visita a Iraq, en plena rueda de prensa, un periodista le ha lanzado ambos zapatos al todavía presidente estadounidense, al tiempo que le llamaba "perro". El presi ha estado listo (pues sí, debe ser de los pocos reflejos que tiene activados -jeje, todavía me acuerdo de una galletita asesina que se le paró en el gaznate-) y se ha apartado a tiempo.

El periodista lanzador de zapatos ha sido aclamado como un héroe en su país. Y a estas alturas, el comité olímpico está pensándose seriamente incluir una nueva disciplina deportiva entre los deportes de élite: el lanzamiento de zapato. Pensándolo bien, los iraquíes partirían con clara ventaja. Aunque por otro lado, algunos conciudadanos de dicho periodista estiman que no se trata a nadie de esa forma, por muy enemigo que sea.

Admiro profundamente a este valiente chaval, bueno, al periodista. Lástima que Buch no se haya pillado al menos uno de los zapatos en plena troncha. Hubiera sido un final de reinado de lujo. Ultimamente, los líderes mundiales no ganan para sustos. Recordemos que hace apenas unas semanas, al presidente de los gabachos le salió una muñeca vudú con su efigie (a su señora esposa se le acaba de indemnizar con 40.000€ por parte de una empresa fabricante de bolsos, por haber utilizado una fotografía de la primera dama francesa como dios la trajo al mundo, de su época de top model, para uno de sus modelos, que por cierto se ha vendido como churros). Y ahora que lo pienso, no sería tan mala idea que de vez en cuando se le llamara la atención a algún mandamás mandanga de esta manera tan exótica, jeje... Ahora bien, ¿cómo se las va a apañar el periodista para que Papá Noël le deje sus regalos en los zapatos, al lado de la chimenea si se los ha tirado a Bush? ¿Nadie tiene una medalla para condecorar a este intrépido por lanzarle los zapatos a este impresentable? Francamente, confieso que admiro la valentía de este hombre que no ha tenido un ápice de miedo, ni siquiera enfrente del (supuesto) hombre más poderoso del planeta. Y deberían conservar la prueba del delito en un museo para servir de testido a las generaciones futuras. Un gesto aparentemente anodino que está cargado de simbolismo. Ah! y según los servicios de inteligencia americones, los zapatos, si bien no tenían nada que ver con las armas de destrucción masiva, eran bastante peligrosos, más que nada por el olor que desprendían... ¿Alguien podría darme información sobre si en la cultura árabe este hecho desprende un simbolismo especial? De acuerdo, no son formas de dirigirse a nadie, pero reirme, me he reído una jartá... Cuando a veces uno no puede (está muy mal visto) dar una patada en el culo de alguien, y mucho más políticamente correcto que disparar balas, yo le tiraría una de mis zapatillas a alguien. Ala, con viento fresco, Bush. Americans, go home. Por cierto, ¿de qué número era los zapatos? Curiosidad, nada más...

Volviendo al tema principal del post, osease al zapatazo a Bush, y un poquito más en serio... Me temo que de haber vivido Sadam, el periodista de marras estaría ya colgado en la plaza mayor de Bagdad, al igual que ya fueron ajusticiados más de medio millón de kurdos. Y Bush por su parte, no ha hecho sino emperorar con diferencia la situación de este ya de por sí castigado país. Ahora que se va a jubilar de la Casa Blanca, debería calzarse el traje de militar, y con el fusil al hombro, irse a "apatrullar" las calles de la capital iraquí con los soldados. Me temo que no duraría ni cinco minutos vivo... Recodemos que el individuo este reconoció su error (ver un post de no hace mucho) y ya está considerado por medio mundo como criminal de guerra (culpable de haber provocado una guerra injustificada, propiciado la tortura -léase Abu Graib- y unos cuantos etcéteras). Si alguien tuviera la valentía de juzgarle, iba derechito a una celda de prisión de alta seguridad... bueno, o a Guantánamo, para que probara de su propia medicina. Así que lo de tirarle unos zapatos no me parece tan grave. De acuerdo que no son las formas, pero es totalmente disculpable. Bush va a terminar su mandato parodiando una peli de los Hermanos Marx, en héroe indiscutible del Holywood más esperpético, al estilo Reagan. ¿Quién será el próximo en el punto de mira del descontento mundial? Se me ocurre que si el periodista hubiera alcanzado su objetivo, habría entrado en los libros de historia por méritos propios. Ya me veo los epígrafes: Kennedy, asesinado de una bala; Bush Jr, muerto (de vergüenza) al ser alcanzado por un zapatazo en plena troncha.

Por cierto, se me ocurre que a partir de ahora, los asistentes a las ruedas de prensa tendrán que descalzarse, como a la entrada de una mezquita.

domingo, 14 de diciembre de 2008

Happy birthday



No, no es autobombo (aunque por la proximidad de la fecha, podría serlo) lo del título del post de hoy. Es el cumpleaños del ratón de ordenador que estos días ha cumplido 40 años al servicio del internauta.

Da igual quién lo haya inventado, de todas maneras lo olvidaríamos al cuarto de hora. Lo importante es que este objeto que ya tiene la friolera de cuarenta años se ha convertido, con los años, en algo imprescindible con el que pasamos más horas al día que con cualquier otro. Incluso me atrevería a afirmar, sin temor a equivocarme, que muchos hombres lo tocan más que a sus parejas.

Y sino, esa extraña enfermedad de la que se contagian muchos adolescentes, propiciada por los ratones. Cada fin de semana, confina en sus habitaciones a un número creciente de jóvenes, sin embargo llenos de vida durante la semana. Sólo emergen un par de veces o tres antes del lunes por la mañana, lo justo para entreabrir la puerta y aceptar una bandeja de comida. Y es que esta enfermedad tiene un impacto irreversible sobre su cada vez más reducido vocabulario. Sin embargo les prepara para una inmersión bastante rápida en el mundo del trabajo: ideas cortas, conclusiones rápidas y simplistas y sobre todo una gran convicción de que dominan el mundo con un simple click, a pesar de que saben que sólo pueden hacerlo si el sistema lo permite.

Sí, definitivamente, sería necesario determinar un día del ratón.... sin duda.